Los recursos serán usados para concluir proyectos de expansión del segmento industrial en Ciudad Juárez y en Chihuahua, así como otros desarrollos en Reynosa, localidades en donde ha aumentado la demanda de estos espacios por el nearshoring.

Autoridades de Coahuila señalan que los parques industriales que se construyen en la región son espacios profesionales y con todos los servicios, lo que garantiza y atrae más inversiones a La Laguna.

Tan solo el inventario Industrial fronterizo asciende a 24 millones de metros cuadrados en diversos parques para el Industrial Real Estate.

Pese a la crisis por la falta de chips, la reactivación automotriz será relevante por las 13 diferentes marcas de autos y camiones que suman 24 plantas de producción nacionales.

El mercado manufacturero de Ciudad Juárez, en Chihuahua, tuvo un incremento de 150% año contra año en sus inicios de construcción.

El fideicomiso de inversión en bienes raíces dice que en las ciudades de Tijuana, Juárez y Reynosa ya no hay metro cuadrado disponible de naves industriales.

El Real Estate industrial seguirá con fuerte actividad, en gran medida por el e-commerce que continúa requiriendo más y mayores espacios.

Especialistas de la institución financiera pronostican un aumento de la demanda de espacios de 4.2% para el norte del país, 3.5% para El Bajío y 2.7% para el centro.

En el último año, se reporta una absorción neta por encima de los 14 millones de pies cuadrados.

En Monterrey se han construido más de 56 mil m2 en los últimos dos meses, adicionalmente hay en construcción más de un millón 590 mil m2.

México tiene que adaptarse a la alta tecnología y conseguir más ingenieros para cubrir la elevada demanda.

Mediante el modelo nearshoring, empresas en Estados Unidos han recurrido al talento de países en América Latina para encontrar desarrolladores de alta gama.

El inventario del Bajío registró 13.2 millones de m² al cierre del año, lo que representó un incremento anual del 3.1%.

Este año, Tijuana tendrá más de 500 mil m2 en espacios industriales y una inversión de 635 millones de dólares en terreno y construcción.

La posición que tiene México la envidian varios países del mundo, y debe aprovechar el lugar y el momento en el que está para ser una potencia industrial.

Gonzalo Robina, director general adjunto de Fibra Uno, dijo que la relocalización de las cadenas de suministro va a cambiar el destino del país e incluso, si se sabe capitalizar puede ser más trascendente que el Tratado de Libre Comercio.

Gracias al nearshoring, México recibirá nuevas inversiones que beneficiarán tres regiones del país: zona fronteriza, bajío y poblaciones cercanas a los trenes transístmico y maya.

El crecimiento de las zonas industriales en México se irá dando al atender la demanda de espacios y naves que requieren empresas internacionales.

Es clave que los parques industriales puedan ofrecer energía de calidad y el suministro de ésta a un costo competitivo.

La relocalización de inversiones daría ese impulso y México podría representar el 20% de las importaciones de Estados Unidos en 2030.