Anticipan una variación anual de las actividades secundarias al mes de enero de 2021 es de -4.1%, mientras que para las terciarias es de -5.4 por ciento.

Datos del Inegi indican que la confianza en construir o remodelar una casa en los próximos dos años, aumentó 15.7 puntos.

El proceso de recuperación continuará paulatino de la mano con las condiciones económicas y del empleo.

Por la baja base de comparación en abril de 2020, debido al  confinamiento, se anticipa un fuerte rebote de la economía.

636,147 ciudadanos se desempeñan en alguna actividad laboral fuera de reglamentación o bien sin prestación social.

No obstante, más de 4 millones trabajan en la informalidad, con ingresos de 3 mil 707 pesos, y una edad de tiene entre 25 y 44 años.

Los patrones de consumo se normalizaron, pero el fuerte repunte  de contagios podría afectar la recuperación.

Este porcentaje es superior al del periodo enero-marzo de 2020, cuando era de 35.6% y fue la menor tasa de personas desde el 2008.

El rebrote de contagios parece afectar los patrones de consumo doméstico.

Las importaciones repuntan como indicio de la recuperación del mercado doméstico.

Para el caso de la inflación, se ha alejado un poco del objetivo multianual del Banco de México (Banxico), de 3% más/menos un punto porcentual.

En cuanto a los retrocesos en el ambiente de negocios, 28.2% del total de las unidades económicas consideró el marco regulatorio existente como un obstáculo; en 2016 era solo de 20.2%.

El gasto interior se ha recompuesto como consecuencia de la crisis sanitaria y la nueva ola de contagios pone en peligro la recuperación.

El repunte de contagios en meses previos pudo haber debilitado un poco la dinámica económica.

La importancia de la industria de la vivienda radica en que aporta 6% del Producto Interno Bruto (PIB) y que se sitúa por encima de la contribución de la industria automotriz que es del 4%.

La economía mexicana depende en 9% de la actividad turística.

Atribuyó el posible crecimiento al impulso por parte de Estados Unidos y a la tendencia al alza de los precios del petróleo.

Según el organismo, los tres sectores que más han presentado afectaciones por el cierre de empresas son los de servicios privados no financieros (24.9%), comercio (18.9%) y manufacturas (15%).

De este total, 1,775 pertenecen al sector Mipymes, particularmente de la pequeña empresa, refirió Caintra.

Estos empleos se recuperaron en febrero después de registrar cifras negativas por tres meses consecutivos; se toman en cuenta los efectos de la pandemia.