Homex, la desarrolladora de vivienda, reportó una caída del 50% en el volumen de viviendas entregadas durante el segundo trimestre del año en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Esta tendencia a la baja se mantuvo en el acumulado de los primeros seis meses del año, con 138 unidades entregadas hasta el 30 de junio de 2024, frente a las 293 unidades del mismo periodo en 2023.
La compañía atribuye esta disminución principalmente a un menor número de proyectos activos y a un ritmo de inversión más lento en los proyectos existentes.
Con respecto a la distribución por segmentos, el 18% de las viviendas entregadas en el segundo trimestre correspondió a viviendas de interés social (con un valor de hasta un millón de pesos), mientras que el 78% fueron viviendas de segmento medio y el 4% residencial.
Sin embargo, en el acumulado de los seis primeros meses del año, el precio promedio disminuyó un 23%, situándose en 1.1 millones de pesos.
En cuanto al financiamiento, el Infonavit se mantuvo como la principal fuente para los clientes de Homex, representando el 37% del total en el segundo trimestre, seguido por las instituciones financieras con un 30 por ciento.
José Manuel Valadez Lobato y Rene Guerrero Chiquete, co-directores generales de Homex, comentaron: “Durante el Segundo Trimestre de 2024 el ritmo de los proyectos activos de la compañía tuvo un desempeño menor al esperado principalmente derivado de que los proyectos de servicios integrales para el desarrollo de vivienda no tuvieron la inversión necesaria para alcanzar el ritmo deseado”.
De acuerdo a la planeación actual, el ritmo de inversión de dichos proyectos se acelerará durante el tercer y cuarto trimestre del año para así poder alcanzar un ritmo de construcción y venta mayor al observado durante los dos primeros trimestres del año, al mismo tiempo que planean iniciar nuevos proyectos bajo este esquema.
Por lo que, lo anterior desincentiva la compra de vivienda a través de un crédito hipotecario con una institución financiera lo que ha ocasionado un menor ritmo de ventas en proyectos de dicho nivel.
A ello se suma la presión en costos de los principales insumos tales como acero, cemento, concreto y acabados, los cuales presentan aumentos de hasta el 10%, lo cual ejerce presión en la planeación de los proyectos y en la determinación del precio de venta.
