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En Madrid, los inmuebles de las zonas prime se revalorizarán un 6%, solo superados por los de Miami y Los Ángeles.

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En 2023, la vivienda en las zonas más exclusivas de las principales ciudades del mundo tendrá un alza promedio de 2.8%. Es una tasa de crecimiento más moderada que la que se venía experimentando en los últimos años debido a la situación económica que se ha visto agravada por el conflicto en Ucrania, pero que no evita que el mercado continúe en expansión, con un aumento de precios más sostenible que la que habían experimentado desde finales de 2020, cuando el regreso a la normalidad, después del confinamiento, trajo un esplendor inusitado al mercado.

 

 

Una de las ciudades que ganó una posición protagonista es Madrid, al ser la tercera urbe, de las principales ciudades del mundo, en la que el precio de la vivienda crecerá más en 2023. Con una tasa igual a la de Londres de 6% interanual, superada solamente por dos ciudades que crecerán más: Miami (un 8%) y Los Ángeles (un 7%) según las estimaciones de la inmobiliaria Knight Frank.

Las expectativas más optimistas de la inmobiliaria fueron atenuadas por los acontecimientos de los últimos meses. Para el cierre de 2022, las primeras previsiones que se realizaron en diciembre del 2021, contemplaban un alza de 6.1% de media en las 25 ciudades analizadas en su informe.

 

El estallido de la guerra en Ucrania, que potenció un problema de inflación que ya había comenzado a finales del año pasado, la revisión de las previsiones en junio cayó: este año la media de estas ciudades se situará en 4.4% y para el siguiente año será de 2.8%.

 

La disminución se produce porque en 11 de las 25 ciudades se crecerá a un ritmo menor de lo inicialmente previsto. Este año, dos ciudades crecerán a doble dígito: Miami y Dubái, que alcanzarán un 12% a finales del año.

Según el documento, la situación económica ha provocado que el crecimiento sea más uniforme en las ciudades analizadas: los 27 puntos porcentuales de diferencia entre la que más y menos crece en 2022 se reducirán a 12 en 2023.

 

 

"La amenaza de recesión ha crecido, las presiones inflacionarias se han elevado y las tasas hipotecarias están en alza; no obstante, un mercado laboral fuerte o ingresos en aumento mitigarán el impacto de esta desaceleración en las ciudades analizadas", señaló la inmobiliaria.

 

Con respecto a Madrid, es más bien el primer condicionante, un mercado laboral que, aunque comienza a mostrar sus primeras debilidades, ha presentado un gran dinamismo desde el inicio del año.

 

En el caso de Londres, se encuentra en la mira de los compradores internacionales por la actual debilidad de la libra frente a otras divisas. De cualquier forma, advirtió Knight Frank, los riesgos de inflación serán más persistentes en el Reino Unido y la eurozona, con el efecto que tendrá esta circunstancia en el mercado inmobiliario.

 

Moderación en compraventa

A pesar de que el mercado inmobiliario español sigue teniendo un buen ritmo, los expertos coinciden en que este año tendrá dos periodos contrarios.

Después de que se vio una primera mitad del año espectacular, el verano se antoja como un punto de inflexión, en el que el número de operaciones de compraventa se moderará y los precios también. Al fin y al cabo, se viene de unos primeros meses de 2022 de récord, con unas cifras de operaciones inéditas desde antes de la crisis inmobiliaria.

En la última parte del año, se notarán los efectos de la inflación y de la subida de los tipos de interés en el mercado inmobiliario. Sin embargo, no son contrapesos suficientes como para frenar en seco su actividad.

 

 

"Con las subidas de tipos, el costo de las hipotecas será más elevado y los hogares con préstamos referenciados al Euríbor empezarán a perder poder adquisitivo. Por todo esto, prevemos que, de aquí a finales de año, las operaciones de compraventa se moderarán, dejando atrás los porcentajes abultados y abriendo así una nueva etapa con repuntes razonables sin perder dinamismo", opinó Ferran Font, director de Estudios del portal inmobiliario.

 

Por último, para Font la evolución ‘imparable’ del primer semestre del año es la demostración de lo resistente que es el mercado inmobiliario español.

 

"A pesar de la complicada coyuntura internacional y el encarecimiento de las hipotecas a tipo variable, las operaciones sobre viviendas nuevas impulsaron un repunte en las compraventas totales de junio", finalizó el directivo.