Para mejorar la seguridad vial y convertirse en una Smart City, el Ayuntamiento de Cullera, en Valencia, España, invirtió en la instalación de dos radares pedagógicos y dos pasos de peatones inteligentes.

Con ello, la ciudad, que es miembro de la Red de Destinos Turísticos Inteligentes, quiere mejorar la calidad de vida de la ciudadanía y la experiencia de sus visitantes.

La instalación estuvo a cargo de la empresa Pavapark del grupo Pavasal, especializada en la gestión de la movilidad y en la integración y desarrollo de soluciones de Smart City, quien explicó que los radares pedagógicos muestran la velocidad de aproximación de los vehículos con la posibilidad de añadir mensajes e íconos para crear conciencia entre los conductores sobre la velocidad a la que circulan.

Agregó que los radares pedagógicos fueron instalados en el Puente de la Bega y en la calle Corbera, antes del cruce con la calle Fortaleny, las cuales son ubicaciones clave en la conexión de Cullera con la A-38.

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Tecnología para la seguridad del peatón

En cuanto a los pasos de peatones inteligentes, cuentan con 14 placas luminosas de señalización horizontal situadas en los extremos de cada banda blanca del paso de cebra, con seis pilotos luminosos RLP en los extremos de cada zona negra del paso peatonal y dos señales verticales también luminosas.

Cuando los sensores de detección de las señales verticales indican que un peatón se dispone a cruzar la avenida, se activa la señalización luminosa. Solo en periodos nocturnos se activan las placas que emiten una luz blanca. En el día, funcionan los pilotos lumínicos RLP que emiten luz roja, mientras que las señales verticales que cuentan tanto con luz blanca como roja, se activan en cualquier horario.

Ya sea durante el día o la noche, esos pasos de cebra dan aviso de que una persona va a cruzar o está cruzando para que los conductores disminuyan su velocidad o detengan su vehículo.

Uno de esos pasos peatonales inteligentes se instaló sobre la avenida del Racó, a la altura del cruce con la calle Águila, mientras que el segundo se localiza en la calle Cervantes; pero ya está la puesta en marcha de otros dos en la avenida del Port.

En los próximos meses se tiene previsto invertir la ayuda recibida de los fondos europeos Next Generation en la transición digital y verde de la ciudad, además de mejorar la eficiencia energética y la competitividad.

Con información de Smartcity.es