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Un espacio de trabajo enfocado en el bienestar de los usuarios puede propiciar una mejor salud, asimismo, generar ahorros al corporativo.

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El espacio de trabajo corporativo ha evolucionado a tal grado en los últimos dos años, que se observa un incremento en el flight-to-quality en los últimos 12 meses, es decir, el migrar de edificios antiguos a espacios de nueva generación.

Ello representa ahorros en la operación, bajas rentas, mejores condiciones contractuales e, incluso, ahorros importantes en el costo de inversión debido a la alta disponibilidad de espacios acondicionados.

 

Es importante esta evolución, pues se pronostica que un 18% de los empleados con edades superiores a los 55 años llegarán a una edad avanzada con menos salud.

 

Además, el espacio de trabajo corporativo se enfoca en la salud y bienestar de los usuarios, señaló Martha Millán, directora de la división de Estrategias Corporativas de Newmark, al participar en Expo Hábitat 2022.

Antes de la pandemia, 3.2 mil millones de empleados en el mundo vivían con algún malestar, estresados, infelices e inseguros en sus lugares de labor.

Un 77% de ellos con problemas económicos y trabajando vulnerablemente o sin remuneración; 76% con falta de bienestar físico.

 

 

Agregó que el primer costo de las corporaciones son las prescripciones médicas por estrés o depresión, lo que representa costos anuales de 47 billones de dólares por enfermedades crónicas

Y de 28 mil millones de dólares por empleado con rankings más bajos de bienestar, mientras que los empleados sanos solo cuestan 840 mil dólares al año.

También destacó que la forma de trabajar post pandemia ha traído ahorros en el espacio de entre 30 y 50%, y en costos totales de ocupación alrededor de un 30%, mencionó citada en un comunicado.