Ante la evolución de la pandemia, está la oportunidad para reconfigurar la oficina desde sus cimientos, con una sofisticación y mayor uso de la tecnología para respaldar la toma de decisiones, administrar el entorno de trabajo y mejorar proactivamente la experiencia de workplace.
Según una encuesta realizada a 373 profesionales de la industria de los bienes raíces y que suman más de 10 millones de empleados a nivel global, en los próximos tres años se dará una rigurosa reconfiguración de los portafolios globales y se remodelarán los espacios de trabajo por completo.
Para repensar la oficina post-pandemia, el sector se regirá bajo 4 ejes fundamentales que son la sustentabilidad, estrategias, inteligencia y seguridad.
Seguridad. 47% de los encuestados considera que la seguridad se volvió lo más relevante en los espacios laborales, por lo que esperan un incremento en la calidad de sus oficinas en los próximos tres años con protocolos de sanidad más estrictos, accesos con sistemas sin tocar, mayor mantenimiento a sistemas HVAC, constante toma de temperatura, mejor diálogo, sanitarios sin contacto y mayor uso de material sanitario.
Tecnología. Se priorizará en el espacio de trabajo, sensores, elevadores inteligentes o con tarjeta a piso designado y que cada inmueble responda a las necesidades de sus usuarios para contar con información de cómo se utiliza un inmueble, cómo opera y qué tanto puede responder a los objetivos de los futuros ocupantes.
Sustentabilidad. Los líderes de las compañías reconocen que actuar frente al cambio climático y la sustentabilidad es parte de ser un buen negocio por lo que aprovechar la reconfiguración de los espacios de trabajo es procurar el objetivo de una huella de carbono cero en real estate.
En la encuesta, los empleados señalaron que 40% conoce que su compañía ha establecido algún objetivo hacia la huella de carbono cero; 38% que no, y un 22% que lo desconoce.
Además, 37% tiene el propósito de incrementar la proporción de su portafolio con alguna acreditación ambiental.
Estrategias.- 59% considera que la experiencia de trabajar desde casa fue positiva o muy positiva, sin embargo, muchas generaciones de empleados no tomaron en cuenta la identidad corporativa durante la pandemia, y aunque laborar desde casa tuvo buenos efectos, con menos tránsito en las calles, contaminación, estrés, la industria de los bienes raíces se vio obligada a crear nuevas estrategias que permitieron establecer sistemas híbridos de trabajo.
Hablando físicamente se les preguntó qué tanto espacio colaborativo creen que se vaya a dar en los 3 años, a lo que 55% dijo que van a tener mayor espacio y una reconfiguración con distancia sana para poder seguir trabajando en una oficina; 46% piensa en tener más amenidades que permitan a los colaboradores interactuar en el espacio de trabajo y no desde casa; 44% opinó que las amenidades seguirán igual y 10% consideró que habrá menos.
Destacaron que lo que llegó para quedarse es el Hot Desking, que significa que no hay un escritorio designado, si no que se trabaja donde hay espacio. 54% piensa que habrá mucho más de esta forma de trabajar; 34% indicó que será igual, dependiendo del giro de la empresa y 10% menor.
“Estábamos acostumbrados a laborar de forma isotónica y no hipertónica. Esta última es la vivida durante la coyuntura, trabajamos a distancia y nos limitó tener una colaboración virtual, que no es la forma ideal. La isotónica es la interacción e intercambio dentro de la oficina, que es lo que existe en la cultura organizacional, que permite la comunicación entre empleados, un lugar adecuado de trabajo, etc. Consideramos que la oficina es un elemento fundamental, pero necesita adaptarse y requiere de una agenda de transformaciones que se irán dando en los próximos tres años”, destacó Giovanni D´Agostino, presidente en México y director regional para América Latina de Newmark, al participar en el 7º. Encuentro Latinoamericano de Desarrolladores Inmobiliarios (ELDI) 2021 con su ponencia: Repensar la Oficina, la importancia de la ósmosis laboral como generador de valor.