En el marco de la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), el gobierno mexicano incluyó en el paquete económico 2026 la propuesta de imponer aranceles a importaciones provenientes de países con los que no existen acuerdos comerciales, como China.

La medida busca proteger a sectores estratégicos de la economía nacional que enfrentan una competencia creciente, entre ellos la industria automotriz, autopartes, calzado y textil.

De acuerdo con Ari B. Saks, Associate Partner de Impuestos y Coordinador de los Servicios de Inversión en Nearshoring para EY México, “se pretende blindar la producción local en industrias donde pudiera haber una amenaza externa significativa”.

En este contexto, las fechas clave hacia la renegociación del TMEC serán:

• 4 de octubre de 2025: Inicio de consultas públicas por parte de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR).
• 3 de enero de 2026: Presentación del informe de la USTR al Congreso estadunidense, con recomendaciones sobre la extensión del tratado.
• Julio de 2026: Revisión formal del TMEC, donde se decidirá su continuidad.

T-MEC y nearshoring impulsan la relación comercial México–Estados Unidos 

Según las expectativas del sector privado recogidas por el Banco de México, la economía mexicana mantendrá un crecimiento moderado, con una proyección de 1.4% para 2026. Esta perspectiva brinda cierto margen de estabilidad para enfrentar el proceso de renegociación.

Resaltó Saks que las empresas deben prepararse con distintos escenarios y estrategias, colocando la innovación en el centro de sus operaciones, así como participar activamente en la discusión tripartita.

“Es clave que los sectores productivos de México, Estados Unidos y Canadá se hagan escuchar y contribuyan en la construcción de los nuevos acuerdos”, puntualizó.