El indicador reportó un crecimiento mensual de 0.5%, reflejando un menor dinamismo tanto en bienes como en servicios. El consumo de bienes avanzó 0.4% mensual, manteniendo el lento desempeño observado desde septiembre, mientras que el gasto en servicios creció 1.0%, por debajo del repunte superior a 5% registrado el mes previo.
Por subcomponentes, el gasto en alimentos mostró un crecimiento sólido de 2.2% mensual, mientras que los bienes para el cuidado de la salud avanzaron 1.4%. Sin embargo, en términos anuales, el consumo de bienes promedió un crecimiento de 7.3% a noviembre, cifra 2.4 puntos porcentuales menor a la observada en 2024, lo que confirma una moderación estructural del gasto.
En el sector servicios, algunos segmentos ligados al turismo comenzaron a mostrar señales de recuperación. El consumo en restaurantes creció 7.1% mensual, el primer dato positivo desde agosto, mientras que el gasto en hoteles aumentó 3.0%, su mejor desempeño desde abril. En contraste, el gasto en servicios de entretenimiento cayó 19.5%, colocándose por debajo de los niveles registrados a inicios de año. A tasa anual, el consumo en servicios promedió un crecimiento de 10.2%, también por debajo del ritmo observado en 2024.
El gasto en gasolina, utilizado como proxy de movilidad, creció 0.8% mensual, aunque en términos anuales continúa mostrando una caída promedio de 5.3%, evidenciando que la recuperación de la movilidad aún es incompleta.
Hacia adelante, BBVA Research anticipa que el consumo privado se recuperará de manera gradual a lo largo de 2026, apoyado en una mejora paulatina del empleo formal y de la masa salarial real, así como en una posible reducción de la incertidumbre externa. No obstante, advierte que otros componentes de la demanda interna, particularmente la inversión, podrían mantener un ritmo de recuperación más rezagado, condicionando el crecimiento económico en el corto plazo.