En el primer mes del año 2024, el mercado financiero experimentó ajustes notables, con el Índice de Fibras registrando una disminución del 3.5%, mientras que el S&P/BMV IPC, el índice con las 35 acciones más negociadas del mercado, apenas mostró un leve movimiento, con una variación del -0.02 por ciento.
Este desempeño contrasta con los destacados rendimientos que ambos índices presentaron durante el 2023, generando un ambiente inicial de cautela entre los inversionistas.
Para Roberto Solano, gerente de Análisis en Monex, el entorno económico para este 2024 refleja una continuidad con la dinámica del 2023, donde se espera que la evaluación de la ocupación y renovaciones de superficie adquieran especial relevancia, especialmente en un contexto de inflación en descenso.
A pesar de las perspectivas optimistas derivadas de tasas de interés más bajas a nivel macroeconómico, el foco estará en la capacidad del sector para aprovechar las sinergias del nearshoring y atender la creciente demanda de nuevos espacios, ya sea mediante expansiones o desarrollos, consideró.
Mientras tanto, el sector comercial se beneficiaría de un consumo aparentemente "resiliente", y el sector de oficinas apunta hacia un aumento en la ocupación, marcando un punto de inflexión esperado.
La estrategia de nearshoring se consolida como clave para las Fibras industriales, respaldando la visión positiva que se mantuvo a lo largo del 2023. Los resultados del 4T de 2023 se esperan favorables, junto con futuros movimientos en el mercado, como los protagonizados por Fibra Next y FibraMTY.
Para el año en curso, factores como recortes en las tasas de interés, una inflación a la baja, el despliegue de recursos para adquisiciones y desarrollos, la consolidación estratégica y la captación de recursos a través de deuda o capital, así como un posible retorno significativo a los espacios corporativos, serán determinantes. Se prevé un aumento del 8.0% en los dividendos en comparación con el año anterior.
En este contexto, el sector industrial se posiciona como favorito por cuarto año consecutivo, seguido por el comercial. Aunque se anticipa un aumento en la ocupación en el sector de oficinas, el panorama general sugiere que el 2024 podría ser otro año atractivo para las Fibras, consolidando su atractivo desempeño más allá de los hitos alcanzados en el histórico 2019.