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Lo anterior debido a sus iniciativas para alinearse con las acciones climáticas para cumplir con el Acuerdo de París y así ayudar a evitar el aumento de la temperatura a nivel mundial.

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En línea con sus objetivos de transitar hacia una empresa cero carbono, Fibra Uno (Funo), el primer Fideicomiso de inversión de bienes raíces en América Latina, anunció que el mes de octubre pasado obtuvo la validación y reconocimiento de sus objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) por parte de la iniciativa Science Based Targets (SBTi).

Dicha iniciativa establece criterios científicos para alinear las acciones climáticas de las empresas con el Acuerdo de París, y con ello se convierte en el primer y único Fideicomiso de Inversión en Bienes Raíces (Fibra) y una de las primeras 10 empresas mexicanas en obtener la validación de sus objetivos de reducción de emisiones de GEI a corto plazo por la iniciativa SBTi.

“Los objetivos validados por la iniciativa Science Based Targets (SBTi) consisten en reducir las emisiones absolutas de alcance 1 y 2 en un 54.6% para 2032, y las emisiones de alcance 3 en un 32.5% para el mismo año, tomando como base el año 2019”, dijo Funo en un comunicado.

 

En el aviso resaltó que estas metas “se consideran ambiciosas y consistentes con los escenarios de calentamiento global de mantener la temperatura por debajo de los 1.5°C”, ello porque implican una transformación de la gestión ambiental de Funo, que abarca desde el uso de energías renovables hasta la certificación de sus propiedades bajo estándares internacionales.

 

“La validación de nuestro SBTi, es un trabajo que iniciamos desde hace 4 años, sin embargo, nos esperamos a hacerlo público porque queríamos tener un plan de trabajo y pasos medibles para lograrlo, uno de estos pasos clave es alinear la compensación variable de nuestros colaboradores al logro de este objetivo”, comentó Karen Mora, directora de sostenibilidad del fideicomiso inmobiliario.

Fibra Uno había revelado con anterioridad sus planes para transitar a ser una empresa Net Zero o cero carbono para el 2050. Ello implica que tendrá que llevar a cabo acciones que le permitan reducir hasta su máxima capacidad las emisiones de GEI. Entre sus iniciativas está aumentar el consumo de energía de fuentes renovables, disminuir su consumo de energía y certificar sus inmuebles, entre otras.