Si bien mucha de la fuerza laboral ha vuelto a las oficinas, los centros de negocios en las grandes urbes del mundo enfrentan una batalla contra el teletrabajo, razón por la cual los propietarios de los Central Business District (CBD) implementan diversas estrategias para sacarlos a flote.
En el informe The Future of the Central Business District, JLL destaca que la penetración del teletrabajo y el formato híbrido, unido a la obsolescencia de una parte del inventario de oficinas, la competencia con submercados emergentes y la falta de afluencia está poniendo en jaque a los CBD.
La consultora destaca que esta contingencia es más intensa en Norteamérica, donde la tasa de regreso a la oficina respecto los niveles prepandemia oscila entre 45 y 65%. En Europa, se sitúa entre 65 y el 85%, mientras que en la zona de Asia Pacífico es de 70 y el 100 por ciento.
En la distribución por ciudades, Madrid concentra una tasa de retorno a la oficina inferior a niveles prepandemia (20%), en los mismos términos que Estocolmo, mejorando el descenso registrado en Londres (35%) o Frankfurt (30%), pero por encima de Paris y Ámsterdam (15% ambas).
“Los CBD pasarán de actuar principalmente como lugares de trabajo a ser destinos de uso mixto, aprovechándose de su localización en el corazón de las redes de transporte y complementando su oferta con una variedad de instituciones educativas, gubernamentales y culturales”, señala JLL.
La clave para desbloquear el futuro de los CDB es encontrar usos alternos para las propiedades existentes donde se pueda, un ejemplo es el proceso de reposicionamiento en el bajo Manhattan, Nueva York, donde se han reconvertido edificios de oficinas en complejos residenciales, hoteles o equipamientos culturales.
El Dato:
Las estrategias deben ir acompañadas de políticas innovadoras que persigan la mejora de la calidad de vida de la fuerza laboral y pongan el foco en el proceso constructivo, sobre todo en activos que tengan al menos 20 años de antigüedad cuando se conviertan de oficinas a uso mixtos.