Para comprar una casa, además del crédito hipotecario, existen opciones como el contrato de arrendamiento financiero o ‘leasing habitacional’, el cual es una alternativa para las personas que no pueden acceder a un préstamo o comprobar ingresos.
En el sector inmobiliario existe la creencia de que alquilar o rentar es igual a “pagar en saco roto”, comentó Leonardo González, analista Real Estate de Propiedades.com. Es decir, las rentas no generan la tenencia de la vivienda, lo cual representa un gasto corriente muy elevado para los usuarios de los inmuebles.
- Les interesa adquirir una casa que actualmente están alquilando.
- Busquen ocupar una vivienda propia.
- Carecen de liquidez inmediata, como para pagar un enganche.
- Tengan una visión a largo plazo.
- Estén dispuestos a alquilar (en promedio cinco años) antes de adquirir una vivienda.
Arrendamiento financiero y sus características
También se le conoce al contrato de arrendamiento financiero como contrato de ‘leasing habitacional’, el cual es un instrumento que permite a una persona adquirir el inmueble que está rentando una vez finalizado el contrato de alquiler.
En este tipo de arrendamiento se establece un monto mensual a pagar, por un tiempo estipulado, puede ser de uno a 10 años. Posteriormente, si el propietario del inmueble y el arrendatario llegan a un acuerdo para concretar la compra, el precio será residual, es decir, al costo total de la propiedad se le restará las mensualidades pagadas y se obtendrá el precio final.
Una de las principales características del contrato de ‘leasing habitacional’ es que, al finalizar el contrato de arrendamiento, se tienen las siguientes opciones:
- No ejercer su derecho de compra y devolver el bien inmueble.
- Renovar el contrato de arrendamiento manteniendo las mismas condiciones o renegociando.
- Ejercer su derecho de compra.
Para el analista del portal inmobiliario, una de las ventajas del ‘leasing habitacional’ es que los niveles de renta suelen ser mayores, así como el plazo de alquiler. Lo cual resulta beneficioso para el propietario, pues se genera un flujo de efectivo antes de realizar la venta.
“Este mecanismo ofrece certeza para el propietario, debido a que la venta real tiene una mayor probabilidad de realizarse, en caso que el inquilino ejerza su derecho de compra”, agregó.
Con respecto al arrendatario, también tiene beneficios, ya que le permite formalizar una posible transacción con un margen mayor de tiempo. Dando oportunidad de presupuestar o proyectar objetivos a largo plazo.
González destacó que el área de oportunidad en el mercado de arrendamiento es enorme. Actualmente opera con bajo nivel de desarrollo institucional que se traduce en baja formalidad, evasión fiscal y menor transparencia, desafíos que el ‘leasing habitacional’ puede ayudar a sortear.
¿Cómo se hace un contrato de arrendamiento financiero?
Para hacer un contrato de arrendamiento financiero es necesario contar con un arrendador, que concede el uso o goce temporal del inmueble, asimismo, con un arrendatario, que paga un precio periódico por hacer uso del inmueble con opción a compra. También hay que especificar que el arrendatario, al finalizar el contrato, puede o no adquirir el inmueble.
Es importante establecer en el contrato:
- Monto a pagar.
- Plazos.
- Vigencia del contrato.
- Precio del inmueble.
- Cláusulas por incumplimiento.
Ventajas y desventajas del contrato leasing habitacional:
- Flexibilidad en plazos y cantidades.
- Flujo de efectivo para el arrendador.
- La cuota inicial es menor que con un crédito hipotecario.
- No genera endeudamiento.
- No es necesario un crédito hipotecario.
- Se puede negociar con el arrendador los plazos.
Desventajas del contrato de arrendamiento financiero:
- No se puede entregar o devolver el inmueble hasta finalizar el contrato.
- Existen penalizaciones en caso de incumplimiento de contrato.
- En caso de vicios ocultos o pérdida total o parcial del inmueble, el arrendatario deberá continuar con el pago acordado en el contrato.