Al ser México un territorio de eventos sísmicos, de huracanes y demás manifestaciones climatológicas, cada vez es más común que las empresas del sector de la construcción protejan sus desarrollos sin importar si son industriales, corporativos, de vivienda, comerciales o de otro giro, lo importante es estar prevenidos ante cualquier eventualidad que afecte el avance de una construcción.
Sin embargo, poco es lo que se sabe de las fianzas y seguros, pues son como los cimientos de cualquier gran proyecto que no se ven a simple vista, pero que son fundamentales para sostener la estructura.
De acuerdo con estudios de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas del 2022, en el ramo constructor, las operaciones dependen mucho de la inversión gubernamental, en particular de la obra pública, la cual en 2020 tuvo un retroceso por el cierre de la economía derivado de la pandemia.
“La importancia de contar con fianzas que garanticen el desarrollo de los proyectos, ya sea de edificios, obras, corporativos, carreteras, etcetera, da certidumbre a los clientes”, comentó Dulce Amigón, directora de Fianzas y Seguros de Crédito en Lockton México.
Agregó que resulta fundamental contar con la cobertura apropiada para hacer frente a los riesgos patrimoniales que se puedan presentar, y enlistó los diversos tipos de fianzas que existen y para qué funcionan:
- Concurso y licitación: Funciona para mantener la oferta cuando se participa en un concurso al adjudicarse un proyecto o trabajo.
- Anticipo: Garantiza al beneficiario que otorga un recurso económico para iniciar los trabajos y que se invierta en lo que está pactado en el contrato.
- Cumplimiento: Garantiza que los trabajos sean realizados en tiempo y forma, de acuerdo a lo pactado en el contrato, pedido, orden de compra, entre otros
- Vicios ocultos o Buena calidad: Cubre los trabajos que se hayan realizado para que tengan la calidad establecida en el contrato, pedido, orden de compra, etcétera, posterior a la entrega–recepción de obra.
Cabe destacar que estas tres últimas fianzas por lo general se solicitan en un solo contrato, pero en diferentes momentos y su importancia radica en mantener disponibles los activos de las empresas, permitiendo la fluidez y crecimiento.
“Se pueden diseñar planes personalizados de fianzas flexibles y eficaces que se ajusten a las necesidades del cliente, poniendo a su disposición las mejores afianzadoras del mercado,” señaló la especialista.
Un complemento fundamental de las fianzas son los Seguros en construcción, para asegurar la viabilidad de un proyecto, ya que a decir de Mario Ortiz, director de daños en la empresa, “éstos cubren al inmueble desde el primer día que inician los trabajos, pero además y dependiendo la cobertura, también lo hacen con los trabajadores, materiales, herramientas e incluso a terceros, es decir, a personas ajenas al desarrollo, pero que pudieran llegar a tener un accidente a causa de la construcción”.
Ortiz enfatizó que conforme avanza el proyecto, también lo hace la cobertura de los seguros y evidentemente, mientras más progresa la estructura, también se incrementan las posibilidades de algún peligro alrededor y dentro de ella, por lo cual es indispensable tener una protección de esta naturaleza.
“Al finalizar la construcción del inmueble y dependiendo del contrato, el seguro de construcción podrá cubrir la edificación por meses e incluso hasta años después -12 o 24 meses-, por si se presentan desperfectos en la estructura que puedan provocar desgastes, colapsos, accidentes, o si se llegaran a tener eventos naturales como lluvias y terremotos”, indicó el especialista en daños.
Cuando se habla de grandes inmuebles, de edificios corporativos, casi 100% de éstos cuentan con una cobertura de construcción en México, mientras que en otras edificaciones, si bien si acceden al seguro de construcción, lo hacen en menor proporción, pero afortunadamente se vislumbra un alza, señaló la empresa asesora de fianzas.
Hoy en día, cada vez es más recurrente que “los dueños y constructores de nuevas edificaciones estén conscientes de tener las coberturas correctas para proteger sus inmuebles de desastres naturales, eventualidades como incendios e incluso errores humanos con Seguros de obra”, comentó Mario Ortiz.
Los seguros se pueden clasificarse de la siguiente manera:
- Cobertura principal o A:Pérdidas o daños materiales que sufran los bienes en forma accidental, súbita e imprevista. Todo riesgo de construcción, es decir, errores en diseñoy responsabilidad civil, pérdida de ingresos.
- Cobertura B:Por riesgos resultantes de un terremoto, maremoto o situación volcánica.
- Cobertura C:Ciclón, marejada, huracán.
- Cobertura D:Daños que cause directamente el contratistaa la obra o errores humanos. Por ejemplo, cuando una grúa golpea una columna y la derriba.
Adicionalmente a la Cobertura A y con una suma asegurada, se pueden amparar riesgos como:
- Cobertura E:Pordaños a bienes de terceros (10) que ocurran durante la ejecución del contrato de construcción. Cubre los bienes de terceros.
- Cobertura F:Cubre a terceras personas, incluyendo lesiones o incluso muerte. Son personas que no tienen relación con la obra.
- Cobertura G:Se fija una suma asegurada para cubrir gastos que excedan el deducible por concepto de remoción de escombros por estructuras rotas y limpieza.
Tanto Dulce Amigón como Mario Ortiz señalaron que es indispensable tener claridad de todas las etapas del desarrollo de la construcción, para llegar a un adecuado comisionamiento del trabajo hasta que esté en condiciones de entrar en operación y en este sentido, lo que varía son los apetitos de riesgo de las compañías, ya que siempre se puede estar propenso a situaciones climatológicas, dependiendo de la ubicación geográfica.