Vemos esta etapa de incertidumbre como temporal, pero que sin duda afecta al mercado inmobiliario industrial. Sin embargo, también confiamos en que pronto retomaremos el ritmo de crecimiento que hemos tenido durante los últimos cuatro años.
Nuestra visión de futuro para México es optimista. Se fundamenta en nuestras capacidades probadas, que nos han convertido en una potencia manufacturera, donde prevalecen la productividad, calidad, cadenas de valor bien integradas, mano de obra calificada y ventajas comerciales que nuestra nación ofrece, y que son altamente valoradas por las compañías que invierten o buscan invertir su capital.
Vemos este 2017 desde una perspectiva objetiva de cara a los acontecimientos que enfrentamos, con el entender que será un año de grandes desafíos.
Nuestra confianza como Finsa, es que México será el mejor destino de inversión. Eso nos permitirá tener una visión de crecimiento, aunque posiblemente en menor escala de lo que veníamos observando.
México, atractivo a mediano y largo plazo
Específicamente, como empresa, estamos respondiendo a las nuevas condiciones de mercado con cautela y minimizando riesgos; cuidando además a nuestros actuales clientes, con una estricta disciplina financiera y buscando oportunidades para diversificar y ampliar nuestro portafolio.
Los CKDs, como importante vehículo de crecimiento interno, nos permitirán seguir con nuestro programa de desarrollo y adquisiciones. Tenemos la visión de desarrollar tres nuevos parques industriales en los próximos dos años, en mercados que actualmente son estratégicos a través de una gran diversidad de sectores, no únicamente el automotriz.
Nuestro país sigue siendo atractivo en el mediano y largo plazo en la industria de Real Estate, pero se debe tener claro en cuáles mercados invertir y con qué compañías asociarse para lograr los objetivos de retorno planteados.
Texto:Sergio Argüelles
Foto: FINSA