En México, el 46% de los jóvenes de entre 20 y 29 años aún viven con sus padres, según datos recientes de la OCDE. Aunque esta cifra ha disminuido en los últimos años, sigue siendo elevada en comparación con países europeos como Dinamarca o Suecia.

Lo que este fenómeno refleja son factores culturales y económicos, incluyendo el alto costo de la vivienda y los salarios promedio. Para muchas familias, convivir más tiempo bajo el mismo techo se convierte en una estrategia para apoyar a los jóvenes mientras consolidan su independencia económica y se preparan para dar el paso hacia la renta de su primera vivienda.

Poder independizarse y rentar tu primer hogar es un momento emocionante, pero también requiere planificación para evitar sorpresas.

Y aunque puede parecer un reto, una buena organización hará que este proceso sea mucho más sencillo. Te compartimos algunos puntos esenciales que Patricia Ríos, directora comercial de Coldwell Banker México, enlista a continuación para que tu experiencia sea positiva desde el inicio.

1. Define un presupuesto realista

Antes de buscar propiedades, analiza tus ingresos y calcula cuánto puedes destinar a la renta sin comprometer otros aspectos importantes, como el ahorro o el entretenimiento. Los expertos sugieren que este gasto no supere el 30% de tu ingreso neto mensual.

2. Ubicación estratégica

Vivir cerca de tu trabajo, escuela o lugares que frecuentas puede ahorrarte tiempo y dinero en traslados. También es importante elegir una zona con acceso a servicios básicos como transporte público, supermercados, hospitales y más. Este tipo de decisiones marcan la diferencia a largo plazo.

3. Ten en cuenta los costos ocultos

La renta no será tu único gasto. Considera costos adicionales como depósito inicial, aval o fiador, cuotas de mantenimiento, servicios básicos (agua, luz, gas, internet) y reparaciones menores. Prepararte para estos gastos evitará complicaciones financieras.

4. Inspecciona la vivienda

Antes de comprometerte, visita la propiedad y revisa su estado general. Fíjate en detalles como humedad, grietas, funcionamiento de las instalaciones eléctricas y tuberías. Una inspección a fondo puede ahorrarte problemas futuros.

5. Revisa el contrato de arrendamiento

El contrato es clave en cualquier alquiler. Léelo detenidamente para entender las cláusulas, incluyendo plazos, aumentos de renta, penalizaciones y condiciones de renovación. Si algo no queda claro, consulta con un asesor inmobiliario o legal.

6. Compara opciones

No te quedes con la primera opción. Busca y compara al menos tres propiedades en cuanto a precio, tamaño, ubicación y condiciones. Esto te ayudará a tomar una decisión más informada.

7. Ahorra antes de mudarte

Además de los gastos iniciales, es recomendable contar con un fondo de emergencia que cubra al menos tres meses de renta y servicios. También, considera un presupuesto para mobiliario básico como cama, refrigerador y utensilios de cocina.

8. Sé realista con tus necesidades

Evita dejarte llevar únicamente por una decoración atractiva o una ubicación de moda. Prioriza el espacio y la funcionalidad que realmente necesitas para tu día a día.

Rentar tu primera vivienda es un gran paso hacia la independencia, pero también es una oportunidad para desarrollar habilidades como la organización financiera y la capacidad de adaptación. Con estos consejos, puedes hacer de esta experiencia un inicio prometedor en tu vida independiente.

Recomendaciones para tener una experiencia exitosa al rentar por 1ª vez