En los últimos años, el espacio de alquiler vacacional se ha vuelto más concurrido, y su éxito depende más que nunca de seleccionar la propiedad adecuada. La ubicación, las comodidades, la oferta local y otros factores determinan cuántos inquilinos atraerá y cuánto pagarán.
-Ubicación: La ubicación de la propiedad es uno de los factores más importantes a considerar. Elige una propiedad en un destino turístico popular o en un vecindario prometedor que tenga potencial de crecimiento.
-Características únicas: Considera las propiedades que ofrecen características únicas y atractivas, como una vista impresionante, la proximidad a las atracciones locales o un estilo arquitectónico único.
-Servicios: Busca propiedades de ingresos por alquileres vacacionales que ofrezcan una variedad de servicios que tienen una gran demanda entre los viajeros, como Wi-Fi, aire acondicionado, una cocina totalmente equipada, lavadora/secadora y estacionamiento.
-Reseñas: Lee las reseñas para ver lo que han dicho los huéspedes anteriores sobre su experiencia en diferentes propiedades de ingresos por alquiler de vacaciones. Busca propiedades con críticas positivas constantes y calificaciones altas.
-Precio: El precio de la propiedad es un factor importante, ya que afectará la rentabilidad de la propiedad. Busca propiedades que tengan precios competitivos en comparación con otras propiedades en el área.
-Competencia: Investiga la competencia en el área para ver cuántos otros alquileres de vacaciones están disponibles y cómo se comparan con su propiedad potencial en términos de servicios, precio y ubicación.
-Consideraciones legales y reglamentarias: Asegúrate de que la propiedad esté legalmente permitida para ser utilizada como alquiler a corto plazo y conoce las reglamentaciones o los requisitos que puedan aplicarse.
-Investiga las finanzas: Usa un recurso que tenga matrices financieras disponibles como AirDNA o Mashable.
Las opciones para convertir un alquiler vacacional de bajo rendimiento incluyen pasar al alquiler a largo plazo para obtener ingresos más estables, aunque más pequeños; buscando inquilinos corporativos o convertir la propiedad en co-living para que las partes se puedan alquilar de forma independiente.