En el mercado premium residencial, los países europeos son de los destinos del mundo que poseen un mayor atractivo para la inversión inmobiliaria internacional.
Como es el caso de Francia, de acuerdo con Knight Frank cuyo análisis anual sobre el mercado de la vivienda de lujo, The Wealth Report, destacó que ocupó el primer lugar seguido de España, e Italia en el tercer sitio, destacando como los tres primeros destinos de Europa que más capital internacional atraen en el ámbito del premium residencial. En cuarto lugar, se encuentra Reino Unido, después Grecia, Suiza, Portugal, Croacia, Irlanda y Alemania completan el Top 10.
Particularmente, en el mercado doméstico, Madrid es la ciudad de referencia, al encontrarse entre las 20 principales ciudades del mundo y en la quinta posición como la “más exclusiva” de Europa, ya que por un millón de dólares se pueden adquirir 106 m² de inmueble residencial.
Siguiendo con Madrid, los precios en la capital española aumentaron un 6% en 2022, llegando casi a los 3,000 euros/m², un máximo desde 2011, con una intensidad por debajo de otras ciudades como Marbella y Barcelona (con crecimientos cercanos al 7% en ambos casos). De acuerdo con las previsiones, para 2023 se verá otro crecimiento adicional del 4%, situando a Madrid en el sexto lugar de las ciudades con mayores crecimientos.
En España, “el crecimiento experimentado por los precios del residencial premium en la capital fue el más pronunciado desde 2018, lo que hace fortalecer la buena situación en la que se encuentra el mercado, así como su resiliencia ante situaciones de incertidumbre económica como la vivida actualmente”, comentó Carlos Zamora, director de Residencial de la agencia inmobiliaria británica.
Los países europeos destacados tienen diversos atractivos para los inversionistas internacionales.
Otros informes colocan también a Madrid como una de las mejores ciudades para invertir en el mercado inmobiliario este año, como lo señala el informe de la consultora PwC y Urban Land Institute (ULI), basado en una encuesta a más de mil agentes del sector, entre bancos, empresas inmobiliarias y fondos de inversión.
Lo que hace que sea un gran candidato es su gran crecimiento urbano, su falta de oferta frente a la elevada demanda en mercados como el residencial, así como la calidad de los activos logísticos y de oficinas, pero su mayor beneficio es el fuerte crecimiento de las energías eólica y solar para los siguientes años.
“La infraestructura energética se ha convertido en el activo inmobiliario más atractivo para invertir, impulsada por la actual crisis de los precios”, puntualizó Richard Garey, socio responsable de Deals en PwC Real Estate, con información de lanacion.com.ar.
