El revalúo o alza drástica en los impuestos inmobiliarios se acordó como una medida para paliar la crisis económica que padece Argentina.
Según especialistas, la medida, que se tomó en conjunto con el Fondo Monetario Internacional, afecta, en una primera etapa, a más de 233 mil contribuyentes.
El gobierno argentino, que acarrea una crisis económica que se desató desde las dictaduras militares que oprimieron a ese país, busca que con una recaudación excedente, se pueda bajar el déficit presupuestario de esa nación.
Ante la medida, el jefe de Gobierno de Buenos Aires, Horacio Rodríguez, cuestionó el plan Nacional y solicitó a la titular de la AFIP, Mercedes Marcó, que se haga un replanteamiento de la medida.
"El (impuesto) a los inmuebles porteños es ilegítimo, discriminatorio y atenta contra la seguridad jurídica”, ya que se busca que los inmuebles urbanos se coticen en valores de mercado ajustados prácticamente al precio del mercado de manera instantánea.
Como antecedente, durante el 2012, el gobierno de Buenos Aires cambió el índice y creó uno específico que se basó en la valuación fiscal multiplicada.
Sin embargo, la medida, con sus vacíos legales, podría permitir que un inmueble sea cobrado hasta dos veces: "Se puede entender que el Gobierno quiera tener la base actualizada, lo que no es lógico es que se cobren dos impuestos a una misma propiedad. Primero se grava en el impuesto inmobiliario y el mismo bien paga Bienes Personales", explicó el especialista en impuestos, César Litvin.
Litvin agregó que el nuevo criterio de interpretación de los impuestos para inmuebles gravados ubicados en Buenos Aires provocará un incremento en los impuestos de entre 400 a 500% en cada propiedad, ya que el mismo bien ya paga el Impuesto Inmobiliario y de Riqueza", agregó el especialista.
En cuanto a equivalencias, el impuesto sería equivalente a cobrar a 7 mil dueños que tengan una casa que esté valuada en por lo menos 30 millones de pesos argentinos.
/Con información de El Cronista.com de Argentina/