A 1992 se remonta el primer registro de la palabra metaverso (en inglés, metaverse), cuando el autor estadounidense Neal Stephenson la utilizó en su novela de ciencia ficción Snow Crash. En ella, el metaverso hacía referencia a un mundo virtual en el que la gente utilizaba avatares para escapar de su dura realidad.
Actualmente, el metaverso está de moda con sus mundos virtuales rápidos, con numerosas actividades económicas presentes y dentro de ellos, el segmento Real Estate se posiciona por lo pronto para comercializar parcelas digitales, entre otros servicios.
El metaverso ha encontrado su nuevo impulso a través de la tecnología blockchain y los NFT o Non-Fungible Tokens, que son activos digitales virtuales. Si antes conferíamos valor a bienes tangibles que podíamos tocar y ver (oro, sellos, obras de arte), ahora lo hacemos con bienes intangibles que vemos, pero que probablemente no podemos tocar.
Los NFTs garantizan la identidad del propietario de la transacción, y dentro de los terrenos digitales tienen al final un uso muy similar a los que podríamos adquirir en una ciudad real: inversión, disfrute personal o para el desarrollo de servicios y productos dentro de la plataforma.
Una firma, una idea
En este sentido, Decentraland ofrece un universo virtual, dentro del cual Genesis City es la apuesta de ciudad para que los usuarios generen sus avatares y se paseen por ella, visiten sus comercios, disfruten eventos y hagan negocios.
Esta ciudad virtual, comparable en extensión con Washington DC, tiene 900,000 parcelas y algunas ya han sido vendidas por más de 200,000 dólares en criptomonedas, porque no es lo mismo estar en una vía primaria que en una calle secundaria o en las orillas. Al menos los 50 millones de dólares que ya generaron en ingresos, da una idea de lo que viene.
Aunque la mayoría de los metaversos estén en el entretenimiento, los expertos apuntan a que a corto plazo su impacto llegará al sector salud, arte, real estate, administración y el comercio.
Tal como sucede en Roblox, un usuario podrá desplazarse con su avatar de un metaverso a otro, llevar consigo sus activos digitales en ropa, arte, dinero y vender ahí sus activos comprados en otro.
Javier Plazas, consultor experto en lujo y transformación digital afirma que estamos en una fase similar a cuando empezó el e-commerce, cuando muchos pensaban que sería imposible comprarse un zapato sin probárselo en cuanto al metaverso.
Oferta variada de inicio
Varias empresas, actualmente ya ofrecen servicios de real estate en el metaverso, como Sandbox, Somnium, Upland y Cryptovoxels y Metaverse Property.
Esta ofrece servicios de renta, administración de propiedad, marketing, desarrollo de proyectos y consultoría, además de poseer un proyecto de inversión, denominado Reit, donde ya se contempla la creación de un fideicomiso de inversión inmobiliaria (Fibra) virtual en el metaverso, garantizando la propiedad del bien raíz virtual a través de un NFT o token.
El especialista afirma que viene una etapa de crecimiento masivo y global y la simultaneidad que se detonará más con la expansión del 5G.
Además que habrá más accesibilidad e interoperabilidad, pudiendo ir de un espacio a otro sin necesidad de registrarse, aunque el peligro es Facebook, Instagram y WhastApp, terminen monopolizando este mundo virtual.
Con información de Xataka y Eje Prime