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Los hoteles operan con políticas de seguridad, regulación y tarifas más altas, por lo que es relevante que haya “piso parejo” para todos los jugadores de sector.

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Airbnb en México es un concepto que no compite con el modelo de negocio de los hoteles de negocios, aseguró Guillermo Bravo, director de inversiones de Fibra Hotel (Fiho).

“Es un gran concepto, a nosotros nos gusta la buena competencia, pero Airbnb no compite directamente con nosotros porque ofrecen algo diferente a los servicios de los hoteles de negocios”, sostuvo. 

Detalló que los representantes de las empresas optan por hospedarse en hoteles de negocios que operan bajo marcas reconocidas debido a temas de seguridad y por sus propias políticas, por lo que Airbnb no representa una competencia en este nicho.

Sin embargo, Guillermo Bravo consideró que en el segmento de “resorts” sí llega a representar un grado de competencia, aunque la experiencia que cada opción ofrece es muy distinta.

“Airbnb (plataforma digital dedicada a la oferta de alojamientos) le abrió las puertas a los viajeros que antes no tenían la capacidad de viajar, y eso es muy bueno para todos”, aseveró.

No obstante, el directivo destacó que la competencia que puede haber con la plataforma de alojamiento de origen estadounidense representa una desventaja en el sentido de que no pagan ciertos impuestos, así como servicios de luz o agua.

“Los hoteles tenemos que competir con políticas de seguridad, con regulación, con tarifas más altas, entonces no siempre es una competencia legítima, esa es la parte en la que nos gustaría que haya “piso parejo” para todos”, resaltó el responsable de las inversiones del fideicomiso hotelero.

Enseguida destacó que el modelo de Airbnb es innovador y ha puesto sobre la mesa el papel que la tecnología está jugando en el sector hotelero. “No podemos cerrar los ojos a que esto va a persistir”, añadió.

Por lo que dijo que FibraHotel enfocará más sus productos al perfil de los usuarios para darles mayor valor agregado.

Actualmente, el fideicomiso tiene un portafolio integrado por 86 hoteles que suman más de 12,500 habitaciones, los cuales están ubicados en 26 estados de la República Mexicana, entre ellos, Ciudad de México, Querétaro, Nuevo León y Quintana Roo. Opera bajo marcas reconocidas a escala internacional como Camino Real, Fiesta INN, entre otros.