Especialistas indican que a pesar de la compleja situación económica generada por la pandemia derivada del COVID-19, el sector inmobiliario se mantuvo activo, y por lo mismo, pronto tendrá la necesidad de hogares del segmento con precios entre los 500 mil y el millón de pesos (mdp).
Dato que contrasta con la necesidad de vivienda media y residencial, que registrará precios arriba de los 4 millones de pesos, y que va a presentar un menor dinamismo en México, refirió la firma consultora Ai360.
Ante este panorama, constructoras y comercializadoras se hallan ante el reto de cubrir esa demanda con opciones de vivienda de calidad, bien ubicada y asequible de manera rápida; algo complejo ya que la industria de la construcción fue de las que pararon por completo sus actividades.
Mateo Turanzas, director de Innovación y Transformación Digital de Quiero Casa, refirió que “tendremos que apretar el paso con las constructoras para hacernos de más inventario tan pronto como sea posible y así satisfacer la demanda de quienes pausaron su intención de compra”.
“Cabe decir que los expertos inmobiliarios prevén que los espacios con precios de un millón y millón y medio de pesos desaparecerán en el corto plazo; al ser un segmento en el que actualmente compiten muy pocas comercializadoras, entre ellas, Quiero Casa”, indicó esta firma en un boletín.
Turanzas resaltó que contar con inmuebles bien ubicados y asequibles podría mantener estable al sector, si además se consolida el respaldo de la Sociedad Hipotecaria Federal y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a la industria constructora, conforme se informó recientemente.
Por otra parte, el vocero refirió que aunado a la rapidez con que las constructoras y comercializadoras deberán enfrentar la demanda de vivienda en el corto y mediano plazo, habrá que enfocarse en cubrir otros factores relevantes como:
1. Mejorar los canales de compra en línea. La calidad de información y recursos tecnológicos con los que se llame la atención del comprador son un diferenciador que influye en la toma de decisión.
2. Ofrecer inventario con plusvalía. Las personas buscarán resguardar su inversión en inmuebles, por lo que constructores y comercializadores tendrán que hallar proyectos mejor construidos y duraderos.
3. Implementar espacios adicionales. Al migrar a formatos remotos de aprendizaje y de trabajo, la relevancia de espacios como estudios y terrazas cobrará relevancia y será factor decisivo a la hora de comprar.