La vivienda residencial continúa llamando la atención de su público objetivo, quienes ceden ante la oferta de los nuevos desarrollos en este segmento, debido a sus altos niveles en seguridad, privacidad, amenidades y estatus. De esta manera, 2018 cerró con ventas positivas y la previsión de un escenario inmediato en el mismo tenor, aunque moderado.
Reportes señalan que las ventas continuarán siendo positivas en 2019, aunque ‘moderadas’, respecto de 2015 y 2016, cuando se incorporaron muchos proyectos en plazas que cuentan con todos los servicios y con una consolidación urbana importante que impulsó la colocación de este tipo de unidades, explica la firma de consultoría Softec.
"Si bien no son extremadamente buenas o crecientes, (las ventas en 2018) sí son superiores a las que tenemos en otros segmentos, como el medio o el de interés social", comenta Claudia Velázquez, directora de Operaciones de Softec. En tanto, Marisol Becerra López, de la dirección Técnica de Consultoría de Tinsa, refiere que las ventas en los segmentos residencial y residencial plus observaron un decremento de 12% en el cuarto trimestre de 2018, en comparación con el mismo periodo del año previo, mientras que el inventario en ese mismo lapso registró un alza de 31% para quedar en 19 mil 938 unidades.
Juan Carlos Castro, director de Operaciones de Briq, señala que, como observador del mercado desde su plataforma de fondeo colectivo, enfocada en inmuebles de este segmento, han observado "una disminución del ritmo de venta en general", aunque precisa que esa percepción cambia dependiendo del lugar.
No obstante, se estima que las ventas serán positivas. Óscar Navarro, de Coldwell Banker, prevé que este año podrían aumentar 3%, "porque hemos visto que las personas que tienen el perfil para adquirir este tipo de propiedades están pensando en comprar su segundo hogar o una casa de descanso". Y para quienes quieren resguardar su inversión sigue siendo muy atractivo.