El gobierno federal presentó el Plan Nacional Hídrico para los próximos seis años cuya visión es recuperar el derecho humano y el rescate de la soberanía nacional en materia de agua, donde uno de los cinco puntos principales es recuperar las concesiones.
“El agua deja de verse como una mercancía y se reconoce como un derecho, esa es una de las esencias del Plan Nacional Hídrico. Se deja atrás la visión neoliberal. Ya había iniciado con el presidente López Obrador, pero le vamos a dar un impulso mayor a recuperar el agua como un bien de la nación y como un derecho humano”, subrayó la Presidenta Claudia Sheibaum.
Contempla este programa obras de infraestructura en todo el país, de hecho, se está trabajando con estados y municipios en la elaboración de un Plan Maestro donde se determinará el estado actual de la infraestructura y también la necesidad para desarrollar nuevos proyectos; estos proyectos se van a financiar a través de los programas federalizados PROSANEAR, PROAGUA, PRODDER, y con inversión estatal y federal directa.
Se tiene contemplado también que parte del Fondo de Infraestructura Social que reciben los municipios, durante 2025 se destine para temas de agua.
Algunas presas que serán objeto de obra pública para atender los problemas de estrés hídrico son la Presa El Novillo, en La Paz; la Desaladora de Rosarito, en Baja California; la Presa de Milpillas, en Zacatecas; el Acueducto Solís-León, para Guanajuato; el Acueducto La Cangrejera-Coatzacoalcos, en Veracruz.
Cinco ejes
Desde Palacio Nacional, durante la conferencia matutina, la ejecutiva federal manifestó que el Plan contempla cinco ejes primordiales. El primero es ordenar las concesiones, ya que hay usuarios que tienen una concesión de agua, pero no la usan, y en algunos casos hasta la venden.
Sobre este punto aseguró que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) mantiene un diálogo constante con industriales, con distritos de riego, quienes están dispuestos a regresar la concesión de agua que no están utilizando.
“Las concesiones nos van a permitir disminuir la sobreexplotación y poder disponer de agua, que hoy está concesionada para otros usos, principalmente, para el consumo humano”, puntualizó.
Otro eje del Plan Hídrico es lograr la eficiencia en el riego agrícola, por lo que ya han identificado los distritos de riego para tecnificarlos. El financiamiento provendrá de los estados y otra parte directamente por los usuarios.
“La tecnificación del riego nos va a permitir ser más productivos en el campo y tener disponibilidad de agua, esa agua que no se va a usar porque ahora se va a usar más eficiente, para disponerla para otros usos”, acotó.
Los proyectos estratégicos de agua serán un cuarto eje, diseñados para realizar inversiones que permitan redirigir el agua hacia las zonas donde más se necesita para el uso humano, garantizando su acceso como un derecho fundamental.
Bajo la vertiente de saneamiento y medio ambiente se llevará a cabo la restauración de varios cuerpos de agua, con un enfoque especial en tres ríos clave, contribuyendo así a la mejora del entorno ambiental.
“Todo esto es parte de un Plan Nacional Integral en donde una de las primeras acciones es esta firma que se hace el lunes, que se ha venido trabajando ya por meses, en donde hay incluso industriales que van a decir “yo regreso esta agua que tenía concesionada porque en este momento no la estoy utilizando” e incluso compromisos de inversión privada para cumplir con las normas para reciclar agua, para utilizar en la industria agua tratada”, sostuvo Claudia Sheinbaum.