El contrato que ampara el arrendamiento de un terreno de 442 hectáreas -cercano a una mina de roca caliza- se firmó en 2013, el cual estará vigente hasta julio de 2018, a excepción que el Gobierno colombiano lo terminé anticipadamente.

La situación de la cementera en Colombia surgió cuando quiso adquirir la totalidad de las acciones de la zona para construir una fábrica y extraer la roca, llegando a un acuerdo de entendimiento con C.I. Calizas, propietaria de las acciones; sin embargo, ésta última se encontraba en proceso de extinción de dominio por haber pertenecido al chatarrero José Aldemar Moncada.

Debido a ello la trasferencia de propiedad a Cemex Colombia no fue completada. La empresa considera poder negociar una extensión del arrendamiento cuando se resuelva el proceso legal en curso.

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