Una de las modificaciones consiste en que se cambió el concepto de verticalidad por densificación; también se aumentaron los rangos de los subsidios; se establecieron lineamientos para la evaluación de la reserva territorial, y se otorgarán subsidios adicionales a la población con menores ingresos, de 1.5 salarios mínimos a 3.5 salarios, detalló el titular de la Sedatu, Jorge Carlos Ramírez Marín en un comunicado de prensa.
Conforme a los nuevos criterios de elegibilidad, el gobierno de la República garantiza que la construcción de vivienda sea en lugares que tengan todos los servicios, pero también que haya fuentes de empleo cercanas.
Por su parte, el subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Fernando Aportela, anunció dos nuevos instrumentos financieros que van a contribuir al desarrollo de la vivienda: una línea de crédito sindicada con recursos de la banca de desarrollo, de Sociedad Hipotecaria Federal y de Nacional Financiera; la línea será de 8 años con un periodo de revolvencia de 5 años, para apoyar vivienda nueva.
El segundo instrumento, agregó, es la emisión de certificados bursátiles con créditos a la construcción.