A lo largo de 2024, los precios de alquiler en Estados Unidos han mostrado una tendencia hacia la disminución, con un descenso promedio de $5 (o un 0.3%) en comparación con el año anterior, situando el alquiler promedio nacional en $1,753, según el informe de agosto de Realtor.com. Aunque esta reducción ha mejorado la asequibilidad en muchas áreas metropolitanas, la realidad varía considerablemente de un lugar a otro.
Por otro lado, en las áreas metropolitanas menos asequibles como Miami, Los Ángeles y Nueva York, los alquileres siguen siendo un desafío considerable. En Miami, los inquilinos destinan un 40.8% de sus ingresos al alquiler, a pesar de una leve mejora en la asequibilidad.
De acuerdo con el estudio, en general, la asequibilidad del alquiler ha mejorado en la mayoría de las grandes ciudades, gracias a una combinación de disminución de los alquileres y aumento de los ingresos. Sin embargo, en algunas áreas, especialmente en el Medio Oeste, los alquileres han seguido subiendo, erosionando la asequibilidad en estos mercados.
Además de la variabilidad en la asequibilidad según la ubicación, un factor clave que ha influido en la mejora general es el aumento de la oferta de viviendas en alquiler. En muchas áreas del sur de Estados Unidos, como Miami y Tampa, se ha observado un crecimiento en la construcción de nuevas propiedades de alquiler. Este incremento en la oferta ha contribuido a la disminución de los precios, lo que ha permitido que más familias puedan acceder a viviendas con una menor carga económica en comparación con el año anterior.
Para los inquilinos en estas áreas, la asequibilidad sigue siendo una preocupación constante, y muchos continúan destinando una gran parte de sus ingresos al pago del alquiler, superando el umbral recomendado del 30% de sus ingresos familiares.