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La demanda de propiedades en ciudades costeras está en aumento. Con la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar, La Paz y Mérida se han convertido en destinos top para vivir.

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En los últimos años, la migración hacia ciudades costeras en México ha cobrado relevancia debido a factores como el auge del trabajo remoto, el desarrollo económico en zonas turísticas y la búsqueda de una mejor calidad de vida.

Un estudio reciente de Propiedades.com resalta cómo esta tendencia ha incrementado significativamente la plusvalía en diversas áreas costeras del país.

 

Destacó que entre las ciudades que han visto un mayor incremento en el valor de sus propiedades están La Paz, Baja California Sur, con un aumento del 11.52% en el último año; Mérida, Yucatán, que registró un crecimiento del 10.93%; y Mazatlán, Sinaloa, con una apreciación del 11.29%. Otros destinos como Puerto Vallarta, Jalisco (9.86%); Manzanillo, Colima (9.68%); y Veracruz, Veracruz (4.4%), también experimentaron alzas notables en el mercado inmobiliario.

 

 

Se atribuye este incremento en la plusvalía a una combinación de elementos como la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar, lo que permite a muchas personas mudarse fuera de las grandes ciudades, y el atractivo de un estilo de vida más relajado, cerca del mar. Además, las mejoras en infraestructura y conectividad han facilitado este cambio.

También, el estudio muestra cómo estos destinos se han posicionado en el mercado de venta y renta de propiedades. Por ejemplo, en La Paz, los precios de venta de departamentos varían entre 1,195,500 pesos y 2,281,800 pesos, con un promedio de 1,139,929 pesos. En Puerto Vallarta, considerado un destino premium, el precio promedio de venta es de 2,755,968 pesos.

 

Pasando al tema de la renta, el promedio mensual en estas ciudades costeras es de 17,878 pesos, con Puerto Vallarta liderando como la ciudad con la renta más alta (24,186 pesos) y Veracruz con la más baja (11,744 pesos).

 

Ahora bien, la creciente demanda de propiedades en estas áreas se debe a varios factores, como la posibilidad de trabajar a distancia, que permite a las personas vivir fuera de las grandes urbes, y la atracción de un estilo de vida más tranquilo y en contacto con la naturaleza. Sin olvidar las mejoras en la infraestructura y la conectividad de estas regiones que han sido clave para facilitar esta migración.

 

 

Indicaron los expertos que cada ciudad presenta características únicas que refuerzan esta tendencia. En La Paz, más del 60% de los habitantes se siente seguro, según el INEGI. Mérida se destaca como la segunda ciudad más segura de América, de acuerdo con el estudio 2024 de CEOWorld.

En Mazatlán, la tasa de desocupación bajó al 1.86% en el primer trimestre de 2024, mientras que en Jalisco el salario promedio mensual aumentó a 6,360 pesos. Sin embargo, en Veracruz, aunque la plusvalía creció un 4.4%, este incremento moderado podría deberse a la percepción de inseguridad en la ciudad, pese a las mejoras en los indicadores oficiales.

Finalmente, el análisis ofrece una visión sobre cómo se está moviendo el mercado inmobiliario en las ciudades costeras de México, donde el atractivo principal son las playas y la posibilidad de llevar una vida más tranquila y cercana a la naturaleza.