A través de un crédito hipotecario que otorgan los bancos, las Sofomes o los organismos públicos de vivienda, se puede adquirir una casa o departamento, pero también hay muchas opciones como adquirir un terreno, para remodelar o ampliar nuestra propiedad, e incluso hay opciones de liquidez para diversos fines.
Adquirir un patrimonio, como lo es una vivienda, es cumplir una de las principales metas personales que puede contribuir a mejorar la calidad de vida de una persona y de su familia. Acceder a una vivienda podría ser una buena inversión financiera, porque es la base para seguir aumentando el patrimonio de todo individuo.
Juan Luis Ordaz, director de Educación Financiera Citibanamex, hace una serie de recomendaciones de lo que las personas o familias deben saber antes de solicitar un financiamiento hipotecario y que reproducimos a continuación:
- Ahorra, ya que a la hora de tomar esta importante decisión considera que deberás tener un ahorro de, al menos, 20% de la propiedad que deseas adquirir. Este monto te servirá para cubrir enganche, avalúos, escrituración y otras comisiones.
- Revisa tu presupuesto, en él debes poner la cantidad que mes con mes destinarás para el pago del crédito. Es recomendable destinar menos de 30% de nuestros ingresos, pero lo puedes definir de forma que no desequilibre tus finanzas, puedas cumplir con tus demás gastos y darte un gusto de vez en cuando.
- Elige una vivienda de acuerdo con tus necesidades, por ejemplo: considera el tamaño de terreno, número de habitaciones y ubicación.
- Elige el mejor crédito para tu estilo de vida. En México existen diversas opciones que van desde instituciones privadas como los bancos, hasta instituciones gubernamentales como Infonavit y Fovissste. Datos de la Asociación de Bancos de México (ABM) muestran que la banca comercial coloca el 52% del monto de crédito en México, Infonavit coloca el 39% y Fovissste el 9 por ciento.
- Revisa la tasa de interés que te ofrecen. Entre las más comunes se encuentran las fijas, cuya principal ventaja es que no cambian durante el periodo de vida del crédito; las variables, en las cuales la tasa de interés puede bajar o subir de acuerdo con la situación económica del país o la mixta que es una combinación de las anteriores.
- Según comparativos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros las tasas de interés fijas oscilan entre 8.49% y 16.25%. Recuerda que este tipo de crédito es un compromiso de pago a mediano o largo plazo. Para determinar la mejor opción, compara precios y costos entre las diversas instituciones con el fin de que tengas la certeza que estas contratando la mejor opción de acuerdo con tus necesidades.
- Entre los principales requisitos para solicitar un crédito hipotecario se encuentran: identificación oficial vigente, comprobante de domicilio actual, la Clave única de Registro de Población (CURP), comprobante de ingresos, etc. Es indispensable que cuentes con un buen historial crediticio, debido a que la institución consultará tus antecedentes, entre mejores sean tus registros habrá más probabilidades de que tu crédito sea aprobado.
- Si ya te decidiste a contratar tu crédito hipotecario recuerda poner mucha atención a los términos del contrato que vas a firmar. En él se señalarán todos los derechos y obligaciones a los que estarás sujeto durante el tiempo que dure su contratación, tales como el importe del crédito, el plazo, la mensualidad, los intereses y las penalizaciones que tendrás en caso de no cumplir con las mensualidades.
- Una vez que tienes el crédito hipotecario, considera que tus mensualidades incluyen algunos seguros que protegerán tu patrimonio durante el periodo, los más comunes son los de vida, desempleo y vivienda. Es importante que conozcas cuáles son las coberturas y los términos para hacerlos efectivos en caso de que lo necesites.