Para especialistas, el déficit de médicos que tiene México se explica por la falta de infraestructura hospitalaria para preparar a los profesionales de la salud, así como por las limitadas fuentes de trabajo bien remuneradas.
“Lo que no ha tenido México es infraestructura. Si tú no tienes más hospitales y no tienes hospitales de alta especialidad, no puedes formar médicos ni especialistas, así de simple”, señala Xavier Tello, consultor y analista en políticas públicas de salud.
Subraya que no es una cuestión de escuelas de medicina, pues en muchos países las grandes universidades tienen sus propios centros médicos, lo cual no ocurre en el país, aunque sí en el Tecnológico de Monterrey, que hizo una alianza para disponer del Hospital Universitario en Nuevo León y ahí forma a sus profesionales.
El problema se agrava en la formación de cirujanos especializados, debido a la misma situación. Para formar especialistas en medicina se requieren hospitales de alta especialidad disponibles para ese propósito y no existen los suficientes, refiere Tello, de acuerdo con una publicación de El Heraldo de San Luis Potosí
Por su parte, José Luis Akaki, especialista en enfermedades respiratorias y docente de la Facultad Mexicana de Medicina, de la Universidad La Salle, expone que el problema se debe a que los especialistas se forman ‘a cuentagotas’ debido a que hay pocos espacios para cursar una residencia médica.
Además, una vez que salen de la residencia, no tienen trabajo porque no los contratan, por ello muchos se van al extranjero o a los consultorios de farmacias donde su ganancia es de 30 pesos por paciente. Generalmente los médicos que están en esos lugares son los que pudieron entrar a la especialidad.
Luis Akaki dice que evitar el déficit de médicos en México puede ocurrir si las universidades abren sus plantillas, mejoran sus programas para que haya más buenos médicos, lo cual implica tener mejores maestros e instalaciones, así como que haya más hospitales donde sean entrenados, entre otros aspectos.