Así lo afirmó Gabriella Siller, directora de análisis económico y financiero de Banco Base en conferencia de prensa, que agregó que “estamos viviendo una estanflación moderada, que significa estancamiento económico con alta inflación”, fenómeno que se veía desde el sexenio de 1982-1988, con Miguel de la Madrid”.
Afirmó que para el largo plazo asume un escenario de crecimiento también de 1.5%, bajo la consideración de que después que se presenta una recesión, se observa un efecto rebote que dura uno o máximo dos años, pero para 2022 no se ve que éste pueda ser muy fuerte.
Lo anterior encuentra sustento en que la inversión fija bruta está en un nivel de hace 10 años, entonces esto hace pensar que el crecimiento del PIB a largo plazo será muy limitado. Además, las iniciativas o reformas propuestas generan incertidumbre entre los inversionistas y los consumidores.
Dijo que hay un deterioro en el ambiente de negocios que se ve reflejado en un crecimiento económico bajo, por lo que hacía adelante no se ve cómo podemos regresar al crecimiento promedio del 2% que se tenía previo a 2018.
La actividad económica va muy ligada a la movilidad, por lo que la variante ómicron propiciará deterioro de datos económicos en el primer trimestre de 2022, sobre todo en el sector servicios, por lo que pone en riesgo de que el PIB tenga también en el 1T22 un crecimiento trimestral negativo.