La economía de México caerá -8.7% en 2020, pero su recuperación podría tardar hasta 15 trimestres, por lo que será hasta 2025 cuando veamos que el Producto Interno Bruto (PIB) del país logrará regresar al nivel que se tenía previo a la pandemia (2018).
Así lo afirmó Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de Banco Base, que en conferencia de prensa destacó que la falta de estímulos fiscales, es decir, una política fiscal contra-cíclica, determinarán la recuperación más larga de la historia.
Dijo que no hay bases para una rápida recuperación, toda vez que en el presente año los apoyos gubernamentales apenas representan el equivalente al 1.37% del PIB, de los más bajos a nivel mundial. A lo anterior se le debe de sumar la debilidad de la inversión.
Afirmó que el efecto rebote determinará un crecimiento del PIB de 3.8% en 2021 y posteriormente se podrá crecer a un ritmo de 1.5% anual por la debilidad que muestra la inversión.
Sobre esta última variable, indicó que entre los factores que podrían afectar la inversión, sobresalen:
- Mayor incertidumbre respecto al rumbo de la pandemia.
- Menores ingresos de negocios
- Falta de certidumbre en la política económica.
Para el presente año Banco Base estima una contracción anual de -19.2% en la inversión fija bruta, así como un repunte de 6.7% en 2021, como efecto de una base de comparación muy castigada.
Otra variable que determina la lenta recuperación de la economía es el consumo privado, que significa el 68% del PIB, pero lleva 10 meses consecutivos a la baja y hasta el mes de marzo de 2021 mostrará recuperación.
Señaló que hay algunos riesgos para el desempeño del consumo, entre ellos: Repunte de la pandemia en algunos estados; Mayor cautela en el gasto de los consumidores; Menores ingresos ante una recuperación más acelerada delos trabajos con menos salarios. Anticipa una contracción de -11.3% del consumo en 2020 y un crecimiento de 4.7% para 2021.