|  

Incluso, el organismo también advierte que recuperar los niveles del ingreso per cápita de 2018 en el país llevará más de una década.

1 No me gusta0

La recuperación de la economía mexicana será lenta, por lo que se debe establecer un ambiente que facilite las inversiones para tener un mayor crecimiento en los próximos años, tras la contracción en el Producto Interno Bruto (PIB) que se espera para el cierre de 2020, señala el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

Añade que después del repunte en la evolución de la mayoría de los indicadores económicos posterior al confinamiento, que muchos consideraron el inicio de un proceso de recuperación, su ritmo comenzó a moderarse de manera significativa.

“Esto puede deberse a que el repunte, o ‘rebote’ como se le ha llamado también, parece desvanecerse mientras la actividad económica vuelve al bajo dinamismo que tenía antes de la pandemia, que mostraba ya un debilitamiento paulatino durante poco más de un año”.

En un nuevo análisis, el organismo refiere que el comportamiento de la actividad industrial durante agosto registró un crecimiento mensual de 3.3%, después de registrar repuntes de 18.1% y 7.1% en junio y julio, respectivamente.

Mientras que la población ocupada en agosto recuperó sólo 700 mil puestos de trabajo, tras haber recuperado 4.7 y 1.5 millones en junio y julio pasados. “Como ya hemos señalado antes, las expectativas no parecen tan halagüeñas como se quisiera”, recuerda el CEESP.

Desde luego, señala el ente económico, habrá un repunte para el próximo año, aunque es indudable que no será suficiente para recuperar lo perdido en este, y menos aún la caída acumulada desde 2019.

También advierte que recuperar los niveles del ingreso per cápita de 2018 llevará más de una década pues las expectativas de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México indican un lento avance.

El crecimiento promedio anual del Producto Interno Bruto esperado para el lapso 2021-2030 es de 1.95%, inferior en casi medio punto porcentual al crecimiento promedio de los últimos 26 años, de acuerdo con la Encuesta de Expectativas del Banco de México.

"Con esas tasas de crecimiento, el ingreso per cápita de México será menor en 3.2% real al final de la década, respecto a su nivel de 2018. De presentarse este panorama, las implicaciones negativas sobre el bienestar de la población en estos años serían enormes", expone el organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial.