Los Real Estate Investment Trust (Reits) tuvieron un 2021 de ganancias. El índice FTSE NAREIT Equity REITs subió un 37.29%, un nivel que se ubicó en 10 puntos porcentuales por arriba de las ganancias obtenidas por el S&P 500 en el mismo periodo.

Sin embargo, dentro no todos los 153 fideicomisos que lo integran obtuvieron los mejores resultados. Las propiedades como edificios de oficinas, centros comerciales y hoteles enfrentaron presiones, debido a los cierres a los que se vieron obligados a hacer por la pandemia.

Green Street, una firma de bienes raíces estadounidense, indicó en un análisis que el 2021 se caracterizó por ser un año de recuperación, por lo que mantener el mismo impulso para este 2022 representa ya un desafío para el sector.

Lo anterior porque la incertidumbre en torno a la pandemia y la probabilidad de que surjan nuevas variantes del coronavirus, como actualmente sucede con Ómicron, así como por el aumento de la inflación, puede generar periodo de alta volatilidad para los Reits en la Bolsa de valores.

“Las buenas noticias sobre las vacunas a partir de 2021 impulsaron el rendimiento y los precios de las acciones de algunos Reits más rápido de lo esperado. La demanda se disparó en la primera mitad de 2021 de apartamentos de alquiler en ciudades como Nueva York y San Francisco que habían experimentado un éxodo de inquilinos en 2020”, comentó en el análisis Cedrik Lachance, jefe de investigación de Green Street. 

En otro informe, Green Street sostuvo que los precios de las propiedades habían aumentado un 18% en 2021 y son un 8% más altos que antes de que comenzara la pandemia de coronavirus.  

El reciente aumento en los precios ha sido de base amplia, pero la industria, los apartamentos, el parque de casas prefabricadas y el auto almacenamiento han liderado el camino con ganancias.  

Las propiedades industriales han aumentado 39% en el último año, ante una fuerte demanda de inquilinos, impulsada por el crecimiento del comercio electrónico. 

Mientras que los precios de los centros comerciales y las propiedades de oficinas han sido relativamente débiles y ambos han tenido problemas para recuperar las pérdidas por Covid-19.