Con la intención de mantener la estructura original —construida durante la década de los 70— el proyecto ofrece plantas flexibles, cuyo núcleo de escaleras se desplaza a la fachada sur, permitiendo una planta clara en cada nivel.
De acuerdo con Archdaily, la planeación consiste en la remodelación del edificio de cuatro pisos con una fachada trenzada de acero inoxidable, con una geometría diseñada para minimizar el consumo energético del proyecto. A nivel de calle, la fachada es permeable para maximizar las vistas y la iluminación natural en los recintos comerciales de ese nivel.
Además, se incluye la construcción de un atrio elevado que conecte a las tiendas comerciales con las oficinas de los pisos superiores; esto para estimular una ventilación natural tan necesaria en un clima como el de Madrid.