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Al instalar paneles solares, tu empresa ahorra en electricidad y reduce emisiones de CO2.

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Las empresas están cada vez más comprometidas con la sostenibilidad y la eficiencia energética, lo que ha llevado a un incremento en el uso de energías limpias, como la solar.

 

Instalar paneles solares es una de las alternativas más accesibles para reducir costos y disminuir el impacto ambiental. Esta tecnología no solo ayuda a bajar la huella de carbono, sino que también supone un ahorro significativo en la factura eléctrica.

 

“Antes de cualquier instalación, es necesario realizar un estudio exhaustivo del lugar para asegurar la integridad de la estructura y optimizar la eficiencia del sistema fotovoltaico. Lo ideal es evitar perforaciones en los techos para prevenir daños en la construcción”, explicó Santiago Villagómez, CEO de Energía Real, empresa del sector de energía distribuida.

¿Cómo y dónde instalar paneles solares?

Generalmente, los techos de las edificaciones son el lugar ideal para colocar los paneles solares, indicó el especialista. Tanto si el techo es plano como inclinado, se puede maximizar la captación de luz solar. En techos inclinados, se colocan estructuras que optimizan la orientación de los paneles. Por su parte, en techos planos, los paneles pueden instalarse sin necesidad de perforar, evitando daños en la estructura.

Otra opción, dijo el experto, es utilizar los estacionamientos como soporte para los paneles solares. Además de generar energía, proporcionan sombra a los vehículos, lo que es un beneficio adicional. En empresas con terrenos amplios, los paneles pueden instalarse directamente en el suelo, y en edificaciones sostenibles, es común integrarlos en las fachadas.

 

Villagómez enfatizó que, antes de instalar, es clave realizar un estudio técnico que considere factores como el espacio disponible, el tipo de construcción y la ubicación geográfica. Esto asegura que el sistema sea eficiente y no afecte la infraestructura.

 

Beneficios de los paneles solares

Adoptar esta tecnología ayuda a las empresas a cumplir con sus metas medioambientales, haciéndolas más atractivas tanto para inversionistas como para consumidores que valoran el compromiso con el medio ambiente. Al generar electricidad en el sitio, se puede lograr un ahorro de hasta un 40% en el costo de energía, especialmente si se complementa con el sistema de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), lo que asegura un suministro continuo, independientemente del clima.

Contar con expertos en la materia es fundamental para diseñar una solución adaptada a cada empresa. Elegir un proveedor que siga los procesos correctos garantiza que el sistema fotovoltaico sea eficiente y respete la integridad de la infraestructura. Con ello, las empresas no solo protegen el medio ambiente, sino que también optimizan sus operaciones y mejoran su imagen pública.