La empresa BVG World S.A. de C.V. ha promovido dos amparos contra una eventual clausura de su proyecto “Grand Island Cancún”, un complejo hotelero cuya inversión es de 10 mil millones de pesos y contará con 3 mil habitaciones, representando una de las más grandes inversiones turísticas que se han hecho en 30 años.
Los trabajadores apoyan la construcción porque, aseguran, generará miles de empleos e impulsa la derrama económica en la localidad. Al respecto, Marcos Sacal, director general de la empresa Murano, responsable operativo del proyecto, ha precisado que el complejo supone la creación de miles de empleos, durante su construcción alrededor de 7 mil 500 y durante la operación de 12 mil, entre directos e indirectos, para llegar a una totalidad de 20 mil empleos durante la vida del proyecto.
Entre lo que establecen los recursos promovidos en contra de la obra que incluye la construcción de un Centro de Convenciones (el más grande de Cancún); es que nadie podrá ser privado de la libertad o de sus propiedades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante los tribunales previamente establecidos y que nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en virtud de mandamiento escrito de la autoridad competente, que funde y motive la causa legal del procedimiento.
Según la lista de acuerdos publicada en la página del Consejo de la Judicatura Federal, la autoridad contra la que se están amparando los promoventes del Grand Island es el delegado de programas de desarrollo social del gobierno federal en Quintana Roo, Arturo Abreu Marín, asimismo se da a conocer que los amparos se presentaron desde el 31 de septiembre de 2019, dos semanas después de que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, y el titular de la Secretaría de Turismo federal (Sectur), Miguel Torruco Marqués, anunciaran la importancia del proyecto.