El sector de la construcción en la Unión Europea representa 8.9% del PIB y el 6.4% del empleo, respectivamente, y actualmente busca enfrentar grandes retos, como la economía digital, la eficiencia energética, la economía circular, el cambio climático, los cambios demográficos -en materia de salud, seguridad y educación- y la regulación en materia de protección de datos personales, entre otros.