De acuerdo con datos de SiiLA, actualmente operan más de 112 plataformas tecnológicas inmobiliarias en el país, y casi el 60% de ellas fueron fundadas en los últimos cinco años.
Destacan entre las áreas de mayor innovación la compraventa digital de vivienda, la renta inteligente, la gestión de propiedades, así como herramientas de financiamiento y seguros integradas a plataformas digitales. Tecnologías como la inteligencia artificial, el big data y la automatización de procesos han permitido modernizar procesos tradicionalmente manuales o fragmentados.
No obstante, este crecimiento no ha estado exento de retos. La inversión de capital de riesgo en América Latina se contrajo en los primeros meses de 2025, cayendo un 90% en enero respecto al mismo mes del año anterior, de acuerdo con TTR Data. Esta disminución ha motivado a muchas empresas del sector a replantear sus modelos y a enfocarse en la rentabilidad operativa más que en la expansión acelerada.
Uno de los casos destacados en este contexto es el de Tuhabi, empresa que ha participado activamente en el mercado de vivienda usada en México. Durante el primer trimestre de 2025, reportó un precio promedio de venta de viviendas de 1.2 millones de pesos, cifra menor al promedio nacional de 1.86 millones, según datos de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF). Su modelo incluye el uso de inteligencia artificial para mejorar procesos de compraventa, valuación y gestión de datos.
Más allá de casos particulares, el avance del ecosistema proptech ha comenzado a mostrar beneficios concretos para compradores, vendedores y asesores inmobiliarios. Entre ellos se encuentran:
- Acceso a información actualizada y validada.
- Automatización de procesos como la programación de citas, seguimiento de prospectos y revisión documental.
- Reducción de tiempos de cierre y trámites logísticos.
- Mejor comunicación entre las partes involucradas.
- Integración de servicios financieros, como precalificaciones hipotecarias o seguros, en una sola plataforma.
A pesar de ello, las perspectivas para el ecosistema proptech en México siguen siendo positivas, impulsadas por la demanda de soluciones más eficientes, seguras y accesibles para el consumidor final. La digitalización del sector se perfila como una de las claves para cerrar brechas, ampliar el acceso a la vivienda y modernizar el mercado inmobiliario nacional.