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Un estudio de WeWork y PageGroup reveló que el 78% de los colaboradores mejora su productividad con esta tecnología emergente.

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La inteligencia artificial (IA) es una herramienta esencial de los espacios de trabajo en México, con un 48% de los trabajadores mexicanos adoptando esta tecnología. Entre los más jóvenes, la Generación Z destaca, con un 60% utilizando la IA de manera regular en su trabajo.

 

Con una mayor penetración, la IA ha transformado los procesos y las interacciones laborales, sobre todo con la llegada de sistemas avanzados como GPT-4, señala el estudio de WeWork y PageGroup titulado "Retos y perspectivas del trabajo".

 

Esta herramienta ha captado la atención de las empresas, que buscan optimizar su productividad mediante su implementación, destaca. 

De hecho, el 78% de los usuarios encuestados afirma haber mejorado su rendimiento gracias a la IA.

Sin embargo, este auge ha generado retos. Mientras algunas empresas han adoptado estas herramientas, otras se ven forzadas a acelerar sus procesos para mantenerse competitivas. 

Indicó el estudio que esto ha resultado en un aumento en la inversión en talento especializado y el establecimiento de laboratorios de IA, con grandes empresas como Meta, Google, IBM y Microsoft liderando el camino.

 

También el estudio revela que, la adopción de la IA varía según la edad de los trabajadores: el 60% de los centennials, el 50% de los millennials y el 41% de la Generación X la utilizan.

 

No obstante, conforme se expande la IA, también surgen “preocupaciones”, se lee en el estudio. 

 

 

Aunque el 94% de los encuestados considera que la IA tiene un impacto positivo en el mercado laboral por sus beneficios en productividad, existe el temor de que la automatización pueda provocar la pérdida de empleos y aumentar la desigualdad económica, especialmente en trabajos rutinarios que están en riesgo de ser reemplazados.

Un 21% de los mexicanos sostiene que, a pesar de sus inquietudes, es crucial incorporar estos avances en el trabajo. 

En contraste, el 28% no utiliza la IA debido a la falta de conocimiento, lo que resalta una diferenciación en su adopción.

 

La transformación que la IA está provocando en el ámbito laboral es innegable, pero su aprovechamiento dependerá de la capacidad de las empresas para enfrentar los desafíos asociados.

 

Esto incluye inversiones en ciberseguridad, campañas de sensibilización y educación sobre el uso responsable de la tecnología. Si se implementa correctamente, la IA ayudará a automatizar tareas, a mejorar la productividad y a aumentar la eficiencia en el trabajo.