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El valor de las viviendas no perdería mucho terreno, pero un fuerte aumento en las tasas hipotecarias dañaría más la asequibilidad de la vivienda. 

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El incumplimiento del pago de la deuda por parte de Estados Unidos, que podría convertirse en realidad tan pronto como el 1 de junio llegue sin intervención, haría que el costo típico de una hipoteca se dispare 22%. Las tasas hipotecarias que suben por encima del 8% probablemente superarían una pequeña caída de precios para hacer que comprar una casa sea una colina aún más empinada para  escalar y hacer que las ventas de casas caigan, según un análisis de Zillow.

Sin duda, el gobierno de los EU nunca antes ha dejado de pagar su deuda, y es poco probable que deje de hacerlo ahora. El análisis proyecta lo que sucedería en el improbable peor de los casos de un incumplimiento prolongado, y no es una predicción de que ocurrirá un incumplimiento.

 

"Los compradores y vendedores de viviendas finalmente se han estado ajustando a las tasas hipotecarias por encima del 6% esta primavera, pero un incumplimiento de pago de la deuda podría aumentar aún más los costos de los préstamos y congelar el mercado", señaló el economista senior de Zillow, Jeff Tucker.

 

Agregó que es posible que el valor de las viviendas no experimente una caída notable, pero las tasas hipotecarias más altas afectarían gravemente la asequibilidad, especialmente para los compradores primerizos. “Es de vital importancia encontrar una solución y no ejercer más presión sobre los estadounidenses que se esfuerzan por lograr sus sueños de ser propietarios de una vivienda", dijo el economista.

Un impago de la deuda casi con seguridad significaría una grave perturbación para la economía, con un efecto dominó que afectaría al mercado de la vivienda. Una consecuencia muy probable sería el aumento de las tasas de interés, incluidas las tasas hipotecarias, ya que la confianza debilitada en el pago de las letras del Tesoro significa que los inversores requerirán un mayor rendimiento antes de comprarlas. Las tasas hipotecarias tienden a seguir las tasas del Tesoro y se espera que aumenten como resultado.

 

 

Los compradores de viviendas encuentran pocas opciones para que puedan pagar esta primavera, y se estima que una hipoteca costaría 22% más en septiembre en caso de incumplimiento de pago de la deuda. Eso se suma a un aumento del 82% en los últimos dos años. Un fuerte aumento en las tasas hipotecarias, proyectado para alcanzar un máximo de 8.4% en septiembre en este escenario, congelaría las ventas en un mercado ya enfriado.

Si la montaña de asequibilidad de la vivienda crece aún más, menos compradores potenciales podrán comprar una casa. Las tasas hipotecarias más altas también desalientan a los propietarios de viviendas, muchos de los cuales aseguraron sus préstamos cuando las tasas hipotecarias estaban cerca del 3%, de vender y volver a ingresar al mercado con un nuevo préstamo sería mucho más costoso.

 

Zillow proyecta que este impacto combinado de la retirada de compradores y vendedores eliminaría casi una cuarta parte de las ventas esperadas en algunos meses. Si hubiera un incumplimiento de la deuda, el mayor déficit proyectado se produciría en septiembre, con un 23% menos de ventas de viviendas existentes.

 

Por el lado positivo de la salud general del mercado de la vivienda, los economistas del sitio web de bienes raíces no esperan que el valor de las viviendas pierda mucho terreno, incluso con un incumplimiento. El valor de las viviendas ha dado la vuelta a la esquina esta primavera, volviendo a crecer cerca de las normas históricas después de un periodo de sobrecalentamiento y luego de una recesión de corta duración.

El valor de las casas tiende a caer bruscamente cuando hay un exceso de listados que inundan el mercado, pero un inventario muy bajo en este escenario actuaría como un paracaídas, evitando que los precios caigan demasiado rápido.

Por último, se pronosticó que si EU incumpliera con su deuda, el valor de las viviendas comenzaría a caer a partir de agosto, pero solo en 1% desde los niveles actuales hasta febrero de 2024. Incluso en este escenario pesimista, se espera que el valor de las viviendas aumente 1% desde hoy y hasta finales del próximo año. Eso es inferior a la expectativa actual de un crecimiento del 6.5% durante ese periodo.