Cambiarse de casa puede ser motivado por diferentes razones, pero la crisis sanitaria propició desde el 2020 que muchas personas y familias buscaran una alternativa para vivir, buscando estar más cómodos en sus largos días de home office o colegio en línea.
Normalmente, las personas se cambian buscan algo más cercano a sus actividades laborales, porque quieren una mejor ubicación, espacios más amplios, por la familia crece, o bien dan el primer paso fuera de casa de los padres, entre muchas otras razones.
Buscar el espacio ideal para vivir no debe tomarse a la ligera, toda vez que es una decisión importante, tanto en lo económico como en lo emocional. En los años recientes, buscar a través de las plataformas digitales alternativas, es como el primer paso que da la gente, para observar las casas o departamentos disponibles para venta o renta, posteriormente se busca la asesoría de un profesional inmobliario.
Sin embargo, cuando se genera el interés por un inmueble en particular, hay una serie de dudas que se pueden presentar. Por ello, la plataforma inmobiliaria Mudafy hacer una serie de recomendaciones que las personas podrían tomar muy en cuenta para evaluar una propiedad:
1. Agua: presión y temperatura
Es indispensable asegurarse de que funcione el sistema de calentamiento del agua y que lo haga en un tiempo razonable para evitar malestares y gastos adicionales. Se deben también revisar los grifos de los baños, la cocina y la ducha.
2. El sol
Es importante tener en cuenta las orientaciones: Sur, este, oeste, norte. Esto significa hacia qué lugar “mira” el balcón, la fachada o las habitaciones y, por lo tanto, cómo les ilumina el sol durante el día. Las orientaciones al este reciben más sol por la mañana, al oeste por la tarde y aquellas hacia el norte son más luminosas que las que dan al sur. Sin embargo, esto también varía en cada estación del año. Frente a esto, lo recomendable siempre es visitar la propiedad por la mañana y también por la tarde para ver cuánta luz natural tiene realmente, ya que pueden influir otros factores como los edificios construidos -o en construcción- alrededor y la altura del piso en el caso de los departamentos. Además de la cuestión estética, también ayudará a ahorrar en los recibos de luz.
3. La calidad de la construcción
Es difícil para los inexpertos, sin embargo, golpear las paredes lo suficiente como para que hagan un sonido puede ayudar a darse cuenta si éstas son huecas o no, y por lo tanto ver la calidad del material. Otro detalle a tener en cuenta son los grifos. Es importante que los mismos se mantengan firmes al tocarlos y que éstos no parezcan muy frágiles.
4. Distribución de espacios
Es muy importante analizar la ubicación de cada espacio en relación con los otros ambientes internos y con los del vecino para evitar ruidos molestos o simplemente, aquellos que no se quieran soportar.
5. Sistema de calefacción y refrigeración
Si ya se encuentran instalados se consideran un gran paso para ahorrar un gasto que puede llegar a ser bastante alto. Hoy existen varias alternativas tanto para el frío como para el calor que ya vienen instaladas en la construcción original o que las incluye un propietario anterior. Algunas posibilidades:
● Aire acondicionado centralizado: Cuando ya está en la propiedad, ahorra gastos de instalación y aparatos caros; la desventaja es que muchas veces no se puede zonificar y si la propiedad es grande puede generar un costo mensual elevado por el hecho de climatizar toda la propiedad cada vez que se le utiliza.
● Aires acondicionados split: Es una de las instalaciones más habituales y los aparatos en sí pueden entrar en la negociación de la compra. Una ventaja es que permite orientar mejor el aire a un solo espacio o zona y suelen ser más silenciosos. Una contra: Los aparatos en general se compran por separado, no son baratos y requieren un mantenimiento más frecuente que los centralizados.
● Suelo o losa radiante: Este es un método de calefacción muy utilizado en edificios. La clave para que este método sea agradable es poder regular la temperatura individualmente, ya que en algunos casos se maneja de manera centralizada para todo el edificio y la experiencia puede ser incómoda.
6. Cada cosa en su lugar
Es importante tener en cuenta todos los objetos que se tienen (ropa, vajilla, documentos, comida) y los espacios de guardado disponibles para ellos. Si estos son suficientes, la situación sería ideal. Si aparecen dudas, se puede pensar como una oportunidad para hacer una buena limpieza de lo que ya no se usa. Pero si la respuesta es un no rotundo, se puede evaluar la posibilidad de reutilizar algunos lugares desaprovechados de la propiedad como espacios de almacenamiento, pero esto puede contribuir a que empiecen a subir los gastos.
7. Ojos a la obra
Es indispensable prestar atención a las obras en construcción y los terrenos próximos a edificarse que se encuentran alrededor de la propiedad. Estos pueden influir en la decisión de dos maneras: Por el impacto en la luminosidad de la propiedad y por los ruidos del trabajo de obra.
8. ¿Qué pasa en el barrio?
Es ideal recorrer la zona en distintos momentos: En horas pico, en fines de semana y por la noche. Es importante considerar: Tránsito, iluminación, lugares para estacionar, negocios, farmacias, zonas verdes, estaciones de bicicleta y transporte colectivo, estado general de las calles y, por qué no, qué tan lejos se encuentran los amigos, la familia y hasta los lugares favoritos de la ciudad.
9. Habla con los que más saben
No hay nada ni nadie que pueda dar mejor información que los propios vecinos. Una buena opción será tocar el timbre. Con un poco de suerte, accederán a responder un par de preguntas básicas sobre la zona y la convivencia entre ellos