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En los últimos años, las búsquedas de inmuebles por esta vía pasó de 21 a 42 millones con relación a lo registrado en años anteriores.

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En México existen 71.3 millones de usuarios de Internet, de los cuales, 50.8% corresponde a mujeres y el 49.2% a hombres, respectivamente. En el marco del Día Mundial de Internet, es un buen momento para recordar cómo ha influido en el mercado inmobiliario. Según la última Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de las Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) del Inegi que realizó en 2015, los hogares con Internet pasaron del 39.2% al 52.9% del total, lo que demuestra lo rápido que han evolucionado el sector de las comunicaciones y tecnologías de la información.

A todo esto, ¿cómo se ha beneficiado el sector inmobiliario de esta conectividad? Esta accesibilidad es un factor clave, ya que en los últimos años se ha podido observar un incremento en las búsquedas de inmuebles de 21 a 42 millones con relación a lo registrado en años anteriores, con la Ciudad de México y el Estado de México como las entidades federativas con mayor número de búsquedas tanto en portales como en apps, con 34.75% y 15.09% respectivamente, seguido de Nuevo León (13.50%), Querétaro (9.94%) y Jalisco (7.58%), según el Informe del Mercado Inmobiliario 2018 que elabora Lamudi.

El crecimiento de este segmento es útil para comparar precios de casas en venta, estudiar el comportamiento geográfico de la zona en donde se va a invertir o analizar esquemas de crédito hipotecario que se ofrecen en los sitios de las instituciones financieras y/ gubernamentales como el Infonavit. Otra gran influencia del Internet en el mercado inmobiliario tiene que ver con la parte del contacto con el cliente; el surgimiento de nuevos canales de comunicación (redes sociales, aplicaciones de mensajería) que han transformado la manera en que empresas y usuarios intercambian información.

Gracias a las búsquedas en línea, las compañías inmobiliarias y desarrolladores obtienen datos como edad, ubicación, escolaridad, etcétera, que les permiten aprender de sus consumidores con lo que se podrán establecer mejores estrategias de comunicación y mercadeo.