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El acero es un elemento esencial para el desarrollo económico de la región y, en el contexto actual, cada obra cobra mayor relevancia.

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Para el 2028 se espera que el mercado global del acero crezca un 2.5 % anual, alcanzando los 1.12 billones de dólares, según datos de Reports and Data, y se espera que esta industria influya de manera importante en las tendencias mundiales.

En este sentido, la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero), que aglutina el 95% de la cadena productiva del acero, considera que cuatro serán las principales tendencias para el año próximo en la región.

 

 

1 La sustentabilidad es clave. La COP27 y los temas presentados ya demuestran que, si no se tiene en cuenta la sostenibilidad, los países tendrán problemas irreversibles que enfrentar. Las preocupaciones globales sobre los aspectos relacionados con el cambio climático en el negocio colocan al acero fabricado en Latinoamérica a la vanguardia. Se trata de una producción aproximada de 30% más limpia que la de China, ya que la energía utilizada en la fabricación del acero proviene de fuentes renovables, como la eólica y la hidroeléctrica. Reducir la huella de carbono a lo largo de la cadena de producción es esencial para evitar daños mayores al medio ambiente. Además, el uso de chatarra  también puede ser una opción para las empresas.

 

En el Alacero Summit 2022, en Monterrey, México, se indicó que la industria siderúrgica puede utilizar hasta un 25% de chatarra de acero, porque no hay más, pero seguirá siendo una fue importante.   

 

2 Nearshoring y competitividad. “Las empresas latinoamericanas no necesitan proteccionismo, sino comercio justo, basado en criterios bien establecidos. Cuando el mundo compite en igualdad de condiciones, renunciando a prácticas como el dumping y los subsidios gubernamentales, América Latina se destaca por su capacidad de innovación”, destaca Alejandro Wagner, director ejecutivo de Alacero. La entidad cree que una tendencia para impulsar el desarrollo del sector en 2023 es utilizar el material producido en regiones cercanas, como América Latina, para sustentarse.

3 Educación y creación de empleo. Datos de Alacero muestran que, en América Latina, el sector de acero empleó a 1.3 millones de personas directamente en la producción de 64.7 millones de toneladas en 2021. La región, sin embargo, consume 74.9 millones de toneladas de acero al año. Para defender la generación de empleos y de todo el ecosistema que se beneficia de la cadena de producción, sin embargo, es necesario cambiar algunos paradigmas. Estos cambios generarán beneficios económicos y sociales, aumentando la vocación sustentable de la región.

 

Existe una intensa competencia para atraer el talento más calificado a la industria, pero también tener una mejor infraestructura en la industria es clave, incluso especialistas consideran que la región queda a deber en este tema.

 

4 Desarrollo económico. En la línea de sustentabilidad con protección regional e inversión en educación, la cuarta tendencia es, inevitablemente, el desarrollo económico del sector en la región latinoamericana. El acero es un elemento esencial para el desarrollo económico de la región. Y, además, cada vez cobra mayor relevancia, ya que todo el mundo necesitará más material, de mejor calidad y más sostenible. Como sustancia presente en el inicio de la cadena productiva de una serie de sectores, la evolución del sector tiene un impacto positivo muy fuerte en el conjunto de la economía de la región.

 

Congreso Alacero Summit 2022

Con el fin de discutir las tendencias mencionadas anteriormente, Alacero celebra el Congreso Cumbre Alacero. La edición 2022 se realiza hoy y concluirá mañana en Monterrey, México; asisten las principales voces del sector y ejecutivos de empresas como ArcelorMittal, DeAcero, Gerdau, Ternium, Vale, Autlán, Primetals, Enel, Danieli, Russula, entre otras.