Interjet lleva sin realizar operaciones casi un año, pero alista un plan de reestructura para el 2022, que incluye comenzar vuelos desde los aeropuertos internacionales de la Ciudad de México (AICM), Toluca (AIT) y Felipe Ángeles (AIFA), aunque con plantilla laboral 87% menor. 

Federico Bertrand, nuevo director general de la aerolínea, especificó que anteriormente tenían 5,600 empleados, y para la puesta en marcha de operaciones, que prevé sea a mediados del próximo año, se tendrán entre 600 y 700 trabajadores solamente. 

Informó que ya platican con trabajadores y acreedores para saldar un adeudo cercano a los 40,000 millones de pesos. Además, los empleados que no entren dentro de los planes del reinicio serán liquidados conforme a la ley mexicana, y una vez que la compañía tenga un crecimiento, contratarán nuevo personal. 

El nuevo plan de negocio también considera una conciliación con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), proveedores de aviones y con los pasajeros que se quedaron con vuelos pendientes. 

En la nueva fase, Interjet realizará vuelos en un esquema de aerolínea troncal y, posteriormente, de empresa regional conformada por 20 aviones; el plan es tener vuelos en los próximos cinco a seis meses, con una flota de diez aviones Airbus, mientras que los 22 Súper Jet Sukhoi serán devueltos a sus dueños originales. 

Anteriormente, Interjet contaba con 86 aviones, que tenían operaciones hacia destinos nacionales, Estados Unidos y Canadá. Iván Ramos, abogado de la aerolínea, reveló que presentó una propuesta a la familia Alemán, accionista minoritarios, para que sean inversionistas e inyecten capital a la nueva aerolínea. 

En un encuentro con medios, los representantes de la aerolínea mexicana aseguraron que la empresa comenzará vuelos con una inversión inicial de 5 millones de dólares (mdd); y buscará una inyección de 1,000 mdd en tres tramos, de 5 a 50 mdd, de 300 a 350 mdd y de 300 a 400 mdd. 

Interjet cumplirá un año sin volar el 11 de diciembre y el 8 de enero también cumplirá el año la huelga que mantienen sus trabajadores. Ante esta situación y el nuevo plan de reestructuración, Bertrand afirmó que “tenemos la intención de pagar, no queremos que la empresa desaparezca”.