Las regiones que presentaron resultados positivos en cuanto a la contratación de obra pública, durante los primeros 10 meses del año, fueron el sur-sureste y occidente del país con una variación, por zona, de 1.9 por ciento respecto a 2018.
Cabe destacar que el actual gobierno tiene como prioridad rescatar al sur-sureste, por lo que se le asignaron grandes proyectos: el Tren Maya y el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec. Se añaden la refinería de Dos Bocas y el Pacto Oaxaca.
Si bien el sur-sureste creció en obra pública, aún los proyectos y programas de la Federación no permean en toda la región, destacando las caídas en Veracruz (3.2%), Oaxaca (34.9%), Chiapas (42.8%), Guerrero (44.4%) y Quintana Roo (47.2 por ciento).
Con respecto al Occidente del territorio nacional los estados con variaciones positivas fueron; Colima con 238.8% —líder nacional— y Nayarit con 13.9%, mientras los descensos se dieron en Michoacán, 25.4%, y Jalisco con 44.2 por ciento.
En Colima este aumento se presentó principalmente en obras viales de infraestructura en el puerto de Manzanillo en el Centro de Coordinación, Control, Comando, Comunicación, Cómputo e Inteligencia y parques y espacios deportivos, entre otras acciones.
En cuanto a Nayarit las obras se enfocaron en pavimentación municipal, ejes interestatales y la detonación con diferentes obras en Bahía de Banderas. A nivel nacional, este sector contratante de la construcción presentó su caída más pronunciada desde que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) tiene registros actualizados de su base de datos (2006).
Información de dicho instituto reporta que en el periodo enero-octubre del 2019, el valor de la construcción del sector público en el país ascendió a 110,167 millones de pesos, que significó un desplome de 19.1% a tasa anual real.