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La megaobra estaría siendo construída en una zona de alto riesgo, según la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente.

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Una eventual refinería en Dos Bocas, en el municipio de Paraíso, en Tabasco, se encontraría en una zona de alto riesgo, lo que impactará de forma negativa al medio ambiente; según informó la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA).

“El área del proyecto está sujeta a riesgo alto por inundación marina, riesgo alto por inundación fluvial, riesgo muy alto por inundación causado por marea de tormenta, y riesgo muy alto por erosión causado por oleaje de alta energía”, advirtió la versión pública de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que se publicó el 18 de junio.

La Manifestación es un documento de 2 mil 200 cuartillas, en las que se detalla que la preparación, operación, construcción y mantenimiento del sitio donde estará la refinería azotará de forma negativa en el agua, el aire, el suelo, la geomorfología, la vegetación y la fauna del lugar.

“Ya que el predio se encuentra cercano a un cuerpo de agua intermitente, la construcción de cimentaciones, edificios y la colocación de concretos hidráulicos serán una barrera permanente en la infiltración debido al cambio de las condiciones edafológicas, así como en la dirección y velocidad del flujo hidrológico superficial. La modificación de las escorrentías que conducen las aguas pluviales será permanente una vez que se construyan las plataformas sobre las que se colocarán las plantas de proceso y de servicio”, explicó la MIA.

Además, entre los efectos al medio ambiente se especifican que serían a través de “generación de emisiones contaminantes y partículas suspendidas en el aire. Disminución de los patrones de cobertura de la vegetación. Disminución del número de individuos de especies vegetales inducidas que habitan en el área y alteración puntual a los patrones de movilidad de la fauna terrestre”, advierte el documento. En el lugar donde estaría el proyecto hay vegetación de manglar, la cual está bajo protección especial, además de 133 especies de aves, 29 de mamíferos, 27 de reptiles y 16 de anfibios.

Sin embargo, el documento ratifica que habrá un aspecto económico positivo: “En el aspecto económico resulta positivo, debido a que la realización del proyecto evitará la importación de combustibles y fomentará la autosuficiencia energética de México (…) detonará el crecimiento económico del sureste de México, que se había mantenido abandonado. En el aspecto social, resulta positivo debido a que contribuirá a mejorar la calidad de vida de los habitantes de la región, con la creación de infraestructura y empleo”.