CBRE realizó una actualización de su evaluación sobre las edificaciones dañadas en la Ciudad de México (CDMX). La información confirmada hasta el miércoles 27 de septiembre revela que se registran 44 propiedades colapsadas, así como otras 78 que enfrentan riesgos de colapso u otros daños importantes. De estas 78 propiedades, 35 son del tipo oficinas, comercio, usos mixtos o industrial y en la mayor parte de los casos, se trata de categorías B y/o C.

Asimismo, más de 1,800 propiedades estarían seriamente dañadas, con información aún por confirmar, pero que en su mayoría son residenciales.

La firma de corretaje señala en el mapa anexo la ubicación de las propiedades afectadas, así como el inventario clase B y C de oficinas en la CDMX.

Advierte que en el segmento de oficinas la mayoría de los edificios derrumbados por el terremoto pertenecían a las categorías B y C del mercado. “Aún así, con los datos verificados hasta ahora, parece ser que menos del 10% del inventario clase B y C de la ciudad sufrió daños estructurales”.

Crecerá la demanda de espacios temporales y permanentes, donde los edificios acondicionados o amueblados lograrán una mayor preferencia por parte de las empresas que requieren reubicación inmediata.

En el mercado inmobiliario industrial CBRE México no ha registrado daños significativos en los espacios industriales.

Por lo que respecta a espacios comerciales, los ubicados en las zonas de Taxqueña y Coapa, en el sur de la ciudad, registraron los mayores impactos. Los espacios comerciales a nivel de calle, así como los edificios de usos mixtos y residenciales también resultaron afectados, especialmente en el corredor Roma-Condesa donde del sismo derrumbó 5 edificios.

Finalmente, en materia de hoteles, aproximadamente 5% de las 52,000 habitaciones de hotel en la ciudad reportaron algún tipo de daño y las tasas de ocupación cayeron significativamente en la semana después del terremoto.