En octubre de 2015 BlackRock adquirió la plataforma especializada en gestión de infraestructuras mexicanas “Infraestructura Institucional” y también reveló que tiene 1,000 millones de dólares comprometidos con inversionistas y planes para invertir en los sectores energéticos, empresas de servicios públicos, transportes, comunicación e infraestructura en la América Latina, especialmente en México.
La firma estadounidense inició su unidad de infraestructura en 2011 y hasta ahora se ha especializado en proyectos de energías renovables ubicados en mercados desarrollados de Europa, Estados Unidos y Asia.
En Latinoamérica, BlackRock espera reformas en las políticas gubernamentales, similares a las que terminaron con décadas de monopolio en el sector de energía en México, país en el que espera captar el interés de los grandes inversionistas -incluyendo fondos de pensiones- para impulsar su participación en ferrocarriles, tuberías y parques eólicos.
El año pasado la firma tomó una participación conjunta con un valor de alrededor de 900 millones de dólares en un proyecto de un conducto de gas natural con First Reserve, compañía estadounidense dedicada al private equity, que se espera que comience a operar este año.
Con información de Reuters
{socialbuttons}