Si bien México ha logrado mantenerse al margen en algunos casos gracias al T-MEC, los efectos colaterales de esta guerra arancelaria podrían impactar a su economía de forma indirecta.
Bajo esta coyuntura, un análisis de Banamex plantea tres posibles escenarios económicos para la economía de los Estados Unidos, basados en antecedentes históricos y el entorno actual.
La importancia de ello radica en que al ser el principal socio comercial México, su desempeño es determinante para el rumbo que seguirá en el corto plazo para nuestra economía.
- Desaceleración con inflación:El escenario más probable
- Recesión: Un riesgo latente
Un segundo escenario considera una recesión más profunda si las tensiones comerciales escalan y la confianza empresarial se deteriora. Si bien no se espera una respuesta agresiva de represalias generalizadas (excepto por parte de China), el análisis advierte que las guerras comerciales pueden extenderse por años. Dado el nivel de interdependencia actual entre las economías, cualquier disrupción significativa podría tener consecuencias graves.
- Resolución rápida con impacto limitado: La opción menos probable
El escenario más optimista —aunque con menor probabilidad— contempla una resolución negociada de corto plazo que limite los daños económicos. Este resultado dependería de una voluntad política firme para desactivar las tensiones, algo que parece poco factible en el corto plazo dada la postura de China y la retórica de la administración Trump. Aun así, el análisis no descarta del todo esta posibilidad, sobre todo ante la presión de los mercados y sectores productivos afectados.
Lecciones del pasado
No debemos perder de vista que las perspectivas para la economía de México se han venido deteriorando en los meses recientes y este escenario adverso no contribuye a mejorar la expectativa en el corto plazo.